El gobierno de Portugal supera una moción de censura por su gestión de los incendios
Los fuegos han causado este año más de un centenar de muertos en territorio luso.
El Gobierno del socialista António Costa ha salido airoso este martes de una moción de censura motivada por los incendios sufridos este año en Portugal, que han dejado más de un centenar de muertos.
La votación en el Parlamento no ha deparado sorpresas y la iniciativa, presentada por el partido democristiano CDS, ha sido rechazada con 122 votos en contra y 105 a favor. Fue apoyada por los dos partidos conservadores de la Cámara.
Los socialistas, que están en minoría en la Asamblea, se han visto arropados por sus socios de la izquierda radical, los mismos con los que en noviembre de 2015 alcanzaron una alianza parlamentaria que permitió a Costa llegar a primer ministro.
A pesar de que los partidos de izquierda radical han rechazado la moción, pues consideran que no era la herramienta correcta para abordar la situación, no han negado responsabilidades del Gobierno en la tragedia y le han exigido que refuerce las medidas en materia forestal.
La moción, la primera que se presenta a raíz de una tragedia, fue votada el mismo día en el que el número de víctimas mortales causadas por la oleada de incendios del pasado 15 de octubre ha aumentado a 45 muertos, después del fallecimiento de un herido que estaba hospitalizado. A ellos se suman los 64 muertos que dejó el pasado junio la tragedia de Pedrógão Grande, en el centro del país.
Estas dos tragedias han puesto al Gobierno de Costa en el momento más delicado desde que llegó al poder en noviembre de 2015 y el primer ministro ha asumido las responsabilidades de su gabinete: "El Gobierno está aquí (...) asumiéndose como primer responsable ante la Asamblea de la República", ha dicho Costa, quien matizó que estas responsabilidades deben ser un "acto de compromiso'" para mejorar la situación y ha pedido "consenso político".
Así, el jefe del Gobierno centró sus intervenciones en detallar las medidas que está poniendo en marcha y aseguró que va a 'hacer aquello que quedó por hacer'. En ese sentido, garantizó la 'flexibilidad necesaria' para que en la tramitación parlamentaria de los Presupuestos del Estado de 2018 -cuyo borrador fue presentado hace diez días- se incluyan más medidas de prevención y combate a los incendios.
La crisis de los incendios no sólo ha llevado al Gobierno luso a afrontar una moción de censura sino también a iniciar una remodelación, a raíz de la dimisión de la ministra de Administración Interna, Constança Urbano de Sousa.
Un bombero lucha contra el fuego cerca del municipio de Pucarica, en Abrantes.
Tres bomberos colaboran para apagar las llamas en Cioga do Campo, Cantanhede (Coimbra).
Un avión vuela a través de una columna de humo producto de un incendio forestal en Vila do Rei, Castelo Branco.
Un bombero trabaja para que las llamas no se propaguen en Cioga do Campo, Cantanhede.
Un bombero trata de apagar el fuego que rodea el pueblo de Bracal (Abrantes).
Dos bomberos luchan contra las llamas en la localidad de Rio de Moinho, Abrantes.
