El 'héroe' que logró calmar a un niño con autismo en un tren
"No tienes idea de cuánto agradecí tu ayuda", sobre todo cuando hay tanta gente que "da por hecho que eres mal padre".
Gayna Pealling estaba volviendo a su casa en Farnborough (Inglaterra) desde Portsmouth junto a su hijo Jack, de cinco años, y su hija Amy, de cuatro, cuando de repente Jack "entró en colapso". Jack padece trastorno de déficit de atención (TDA) y autismo.
Por suerte, "un hombre adorable, llamado Dan, se hizo cargo de la situación y comenzó a hablar con mis dos hijos", escribe la madre en Facebook el 30 de septiembre. "Consiguió calmar a mi hijo, haciendo que el trayecto en tren transcurriera perfectamente... muchas gracias, no tienes idea de cuánto agradecí tu ayuda", cuenta. Por eso ese chico se convirtió en "un héroe" para Pealling.
Pealling explicó a HuffPost Reino Unido que tuvo que hacer transbordo con sus hijos, por lo que el viaje fue más largo y pesado de lo normal.
"A Jack le gustan los trenes, pero no le gusta tener que esperar y no saber lo que está pasando. La cosa empezó a complicarse y para cuando subimos al tren, estaba enfadado y molesto, soltaba palabrotas y daba patadas a la silla. Se nos fue de las manos", reconoce.
Pealling comenta que muchas personas a su alrededor chasqueaban la lengua y les miraban, de modo que se levantó y les explicó que Jack sufría autismo y TDA, y les pidió a los demás pasajeros que lo comprendieran.
En un momento en el que estaba intentando que Jack se tomara su medicación para el TDA, el niño se puso a gritar diciendo que no quería tomarlo.
Entonces Dan entró en escena con las palabras "yo también tomo pastillas, ¿por qué no me enseñas cómo te las tomas tú?", recuerda la madre. "Jack aceptó y dijo que se tomaría las pastillas. Dan comenzó a hablar con mi hija y a colorear y, pasado un rato, Jack también quiso sentarse a su lado".
Estuvieron juntos durante el resto del viaje, 55 minutos.
"Jack quería despedirse cuando nos bajamos del tren y así lo hicimos", cuenta Pealling. "Escribí esto en un grupo de 'Spotted in London' (Visto en Londres) y así fue como encontré a Dan y pude darle las gracias de nuevo".
La madre lamenta que haya tanta gente desinformada sobre los niños con necesidades especiales y que, además, "dan por hecho que eres mal padre o que es un mal hijo".
El héroe de esta historia, Daniel Ball (21 años), explicó al periódico Evening Standard que su madre siempre ha trabajado con niños con necesidades especiales, así que suele comprender lo que les ocurre.
"Jugamos con monedas, hicimos dibujos de trenes, les expliqué su funcionamiento. La verdad es que me encanta jugar con niños", contó, en referencia a la situación que vivió con Jack. "Es muy bonito que las personas le hayan dado tanta importancia. Pero, desde mi punto de vista, solo se trata de ayudar a las personas, no es un milagro. No me considero un héroe ni nada por el estilo".
Asimismo, la madre del joven, Barbara, asesora de necesidades educativas especiales, ha lanzado la campaña Come To My Rescue (CTMR) como respuesta a la atención que ha recibido su hijo.
El 4 de octubre explicó en su página de Facebook que "la campaña busca apoyar la actitud de Dan y de otras personas como él que a menudo acuden al rescate de padres que necesitan ayuda". Como parte de la campaña, quiere crear unas insignias con las siglas CTMR para que los padres sepan qué personas están dispuestas a ayudarles en el transporte público en Londres.
Para más información acerca de la campaña, puedes visitar la página de Facebook de Ball.
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Reino Unido y ha sido traducido del inglés por María Ginés Grao