Susana Díaz claudica ante Ciudadanos y elimina el impuesto de sucesiones
Afecta a quienes hereden menos de un millón de euros a partir del 1 de enero de 2018.
Andalucía hinca la rodilla. La batalla tocó a su punto final el miércoles pasado cuando el PSOE y Ciudadanos, su socio en el Gobierno de la Junta, acordaron la supresión del impuesto de sucesiones para todos los contribuyentes que hereden menos de un millón de euros a partir del 1 de enero de 2018. El apretón de manos era una condición sine qua non del partido naranja para renovar el pacto de investidura suscrito entre las dos formaciones con la toma de posesión de Susana Díaz en 2015.
La comunidad andaluza era una de las pocas que aún mantenía un gravamen importante a las herencias, por el que recaudó 330 millones de euros en 2016.
En España, el impuesto sobre sucesiones y donaciones es un tributo estatal cuya gestión y rendimiento han sido cedidos a las comunidades autónomas, que lo destinan a financiar la sanidad, la educación y otros servicios públicos.
Las diferencias entre autonomías son sustanciales. Madrid, Islas Baleares, Castilla y León, Cantabria y La Rioja tienen una imposición mínima o inexistente; Galicia, Cataluña, Comunidad Valenciana o Castilla y León aplican tipos bajos; Andalucía, Extremadura, Aragón y Asturias son los territorios con el gravamen más elevado. Estas diferencias obedecen por supuesto a motivos ideológicos pero también puramente contables.
'DUMPING FISCAL'
La propia Comisión de Expertos del Gobierno para la Reforma Fiscal ya advertía al respecto: "Sería recomendable que la normativa estatal fijara unos límites máximos y mínimos, dentro de los que pudieran moverse las capacidades normativas autonómicas".
Esas diferencias están conduciendo en muchos casos al dumping fiscal, la gran batalla entre comunidades autónomas y que ha tenido a Madrid y Andalucía a cara de perro durante las últimas Conferencias de Presidentes autonómicos.
Andalucía acusa tradicionalmente a Madrid de jugar sucio por tener uno de los impuestos de sucesiones más bajos y con el IRPF y el impuesto sobre patrimonio más bajos de España. De modo inverso, Madrid acusa a Andalucía de financiar servicios públicos andaluces como Sanidad y Educación a costa de los impuestos de los madrileños.
Una herencia de 800.000 euros debe tributar unos 165.000 euros en Andalucía, mientras que las bonificaciones de Madrid lo reducen a 1.500 euros en este territorio. Las regiones socialistas exigen una armonización fiscal que se incluya en la reforma del sistema de financiación, que acaba de comenzar.
Hasta la firma del pacto con Ciudadanos este miércoles, la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, exigía que se armonizara entre todas las regiones y así obligar a la Comunidad de Madrid, que lo bonifica al 99%, a subirlo. Cristina Cifuentes, su presidenta, se negaba.
Los sabios de la Comisión para el Estudio de la Financiación Autonómica han recomendado un mínimo exento común en toda España entre 20.000 y 25.000 euros y establecer un tipo de gravamen entre el 4% y el 5% para las herencias entre familiares directos (cónyuges, hijos y ascendientes).
Madrid llega a ser calificada por algunos de "paraíso fiscal", por su política agresiva en tema de impuestos para atraer inversiones y ciudadanos. Ahora Andalucía tira los dados con las mismas reglas del juego, aunque su recaudación caerá significativamente a cuenta de la rebaja del impuesto.
Según la Estadística de Recaudación Tributaria que publica la Consejería de Hacienda y Administración Pública, durante 2016 un total de 30.371 contribuyentes tuvieron que pagar por recibir una herencia en Andalucía. La liquidación media fue de 8.411 euros. En cambio, 237.002 se libraron al acogerse a alguna de las reducciones de la norma.
144 MILLONES DE EUROS MENOS
El cambio reducirá los ingresos de la Junta en 144 millones de euros respecto de los 300 millones recaudados en 2016. El coste total de esta reforma fiscal será 90 millones de euros, de los que 83 corresponden a la exención del millón de euros. De acuerdo con la liquidación de 2016, solo 200 andaluces presentaron herencias por encima del millón de euros, mientras que la reforma va a beneficiar a cinco mil declaraciones, de los grupos 1 y 2 (de padres a hijos y entre cónyuges) que tuvieron que pagar por situarse entre el mínimo exento, 250.000 euros, y el millón actual.
El secretario general de la formación naranja, Albert Rivera, ha aplaudido el acuerdo andaluz y animaba a otras comunidades del PP a hacer lo mismo. Marín recordó que a 1 de enero de 2018 una herencia de 900.000 euros tributará más en Madrid, 9.000 euros, que en Andalucía, donde no pagará nada. "Ciudadanos", dijo, "extenderá su reclamación a toda España".