El veto migratorio de Trump entra parcialmente en vigor para seis países musulmanes
Los ciudadanos de los países afectados deberán probar que tienen un vínculo con EEUU.
El veto migratorio del presidente de EEUU, Donald Trump, ha entrado parcialmente en vigor este jueves para seis países musulmanes con algunas excepciones que han causado polémica y que permitirán, por ejemplo, la entrada de quien tenga una nuera en el país, pero no de quien tenga un abuelo.
La prohibición al ingreso de personas procedentes de Irán, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen durante 90 días permite excepciones para personas con familiares cercanos en EEUU, aunque esa definición es estrecha, en la medida que excluye a abuelos, nietos, tíos, tías y otros.
Afecta también a los refugiados y musulmanes que no tengan una relación "formal" con empresas e instituciones educativas de EEUU, según han informado en una conferencia telefónica con Efe funcionarios del Gobierno que pidieron el anonimato.
"Vivimos en un tiempo muy peligroso y el Gobierno de Estados Unidos necesita todas las herramientas a su disposición para evitar que los terroristas entren en el país y desaten la violencia", añadieron.
El decreto para prohibir temporalmente el ingreso al país de poblaciones de mayoría musulmana ha comenzado a aplicarse después de que la Suprema Corte de Justicia lo habilitara tras una batalla judicial de cinco meses.
De manera amplia, el Supremo ha determinado que Trump puede negar la entrada a cualquier persona que no pueda probar que tiene un vínculo "genuino" con el país, es decir, que no tengan familia o que no tengan planes para trabajar o estudiar. El Tribunal Supremo dejó en manos del Gobierno la definición exacta de esos límites.
Las nuevas directrices enviadas a las embajadas y consulados de EEUU sobre cómo implementar la orden ejecutiva de Trump establecen que se deberá demostrar una relación con padres, cónyuges, hijos, yernos, nueras o hermanos que ya estén en territorio estadounidense. Excluidos de esa categoría de "familiares cercanos" quedan los abuelos, nietos, tíos, sobrinos y primos.
Esta distinción ha sido considerada como "arbitraria" por organizaciones defensoras de los derechos civiles, como la Unión para las Libertades Civiles en América (ACLU).
El gobierno de Trump afirma que la prohibición es necesaria para evitar el ingreso al país de terroristas, pero los defensores de los inmigrantes alegan que discrimina ilegalmente a los musulmanes.
En sus directivas, el Departamento de Estado otorga a los funcionarios consulares la posibilidad de hacer excepciones y otorgar visados si los solicitantes son, por ejemplo, niños o "individuos que necesitan atención médica de manera urgente". Además, no se revocarán los visados ya aprobadospara evitar el caos que provocó en aeropuertos de todo el mundo la implementación del primer veto en enero.
De forma paralela, la Cámara de Representantes ha aprobado dos proyectos de ley que, de ser ratificados por el Senado, endurecerán las medidas contra los indocumentados. Intensificarán las penas contra los criminales deportados que hayan reingresado al país y castigarán a las conocidas como "ciudades santuario", aquellas que se niegan a colaborar en la expulsión de inmigrantes.