El motivo por el que la reina Letizia y Juliana Awada han sido 'gemelas' en Madrid

Quizá sea casualidad o quizá sea todo un error… o un enorme acierto mediático, quién sabe. El caso es que el primer encuentro entre la reina Letizia y Juliana Awada, la esposa del presidente argentino Mauricio Macri, ha dejado imágenes que se recordarán durante mucho tiempo. La visita de estado de la pareja —la primera que se realiza en el Palacio Real y no en el del Pardo, que queda exclusivamente como residencia para los invitados— ha tenido una serie de coincidencias que la van a convertir en una de las más llamativas del año. Y si no, al tiempo.

La nota de color (literal y figuradamente) la han puesto ellas, las esposas de Macri y del rey Felipe VI. Y lo han hecho por la absoluta similitud de sus atuendos. La coincidencia no ha sido una, sino muchas. Bajo el soleado cielo de Madrid, en el despejado patio del Palacio Real, han desfilado las dos, Awada con un abrigo atado y la reina Letizia con un traje de chaqueta con cinturón y falda lápiz de Felipe Varela (que estrenó en 2013 y ha lucido en media docena de ocasiones) cuyo corte era corte prácticamente igual. Iguales eran también los largos de las faldas y las mangas, y sus escotes en pico y con camisas lenceras debajo… y, para más inri, los colores. Ambas han optado por un tono beis rosado, el de Letizia en un tono más palo y el de Awada ligera, ligerísimamente más lila.

Para rematar el asunto gemelier, pelo y complementos. Ambas han llevado recogidos clásicos, el de Letizia algo más pegado a la cabeza y el de Awada más cardado, y sus maquillajes, con sombras rosáceas y labios naturales, también eran casi iguales, al igual que sus uñas, muy claras. Las piernas de ambas iban desnudas —las de Awada algo más morenas por el verano argentino— y rematadas por zapatos de salón en tonos iguales a los de los conjuntos. Aquí la esposa de Macri ha puesto el toque de moda al optar por unos tacones de tachuelas de la firma Valentino (que llevan varias temporadas triunfando y que rondan los 2.000 euros), mientras que la esposa del rey se ha decantado por unos de Magrit con algo de plataforma interior.

Lo único que las ha diferenciado han sido un par de detalles. Awada llevaba un cuello de piel oscura (sintética, según los medios argentinos) adornando su abrigo diseñado por la argentina Amelia Sabán, lo que le daba un toque de color. Mientras, la reina ha optado por unos grandes pendientes con una piedra rosa que no había lucido hasta ahora, mientras que Juliana no llevaba joyas a la vista.

Al parecer, según algunos medios argentinos esta coincidencia podría haberse dado al no haber un protocolo marcado para el almuerzo real. Mientras que para la cena de gala de la noche las señoras deben ir de traje largo, la única indicación para el día era que "la primera dama no deberá llevar sombrero", según el diario La Nación. Para el portal de noticias BigBangNews, que compara el encuentro entre Awada y Letizia con un derbi Boca-River, la coincidencia se dio porque la única indicación de protocolo que habían dado al equipo del presidente era guiarse por el sentido común.

Parece que el protocolo no ha afectado a los caballeros: correctos con sus trajes de chaqueta oscuros y sus zapatos ídem (Macri de cordones y Felipe VI de hebillas), ambos han optado por camisa blanca, pero Macri con una corbata morada y el rey en azul claro con motas blancas, quizá un guiño a la bandera argentina.

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