El concierto de Sánchez: "No es no", 'color esperanza', alianza "de progreso" y aforo completo

El concierto de Sánchez: "No es no", 'color esperanza', alianza "de progreso" y aforo completo

EFE

Desde la entrada del Círculo de Bellas Artes hasta la parada de metro Sevilla, una larga fila de personas llamaba la atención en el centro de Madrid. ¿Qué pasa?, preguntaban los turistas a los periodistas. El motivo: Pedro Sánchez presentaba su documento ideológico de cara a las primarias del PSOE.

Aforo completo, euforia entre el 'sanchismo' este lunes por la noche. Más de quinientas personas dentro del teatro Fernando de Rojas, otras quinientas en una sala anexa viendo el acto por una gran pantalla y otras cuatrocientas se han quedado en la calle, según fuentes organizadoras del evento.

Tras varios actos fuera de la capital -Castellón, Zaragoza, Murcia y Valladolid-, Sánchez tenía ganas de torear en su plaza. "Buenas noches, Madrid", decía a modo de presentación del acto Odón Elorza. Palmas, gritos de "no es no" y sonando a tope Color esperanza, de Diego Torres. "Saber que se puede, querer que se pueda, quitarse los miedos, sacarlos afuera. Pintarse la cara color esperanza, tentar al futuro con el corazón...". Aires de concierto socialdemócrata.

A modo de teloneros, Sánchez ha tenido a algunos de los participantes en la elaboración de este documento de 33 páginas: Margarita Robles, José Félix Tezanos y Manuel Escudero. Y como fieles escuderos estaban también en el escenario algunos de los diputados del "no es no": Zaida Cantera, Rocío de Frutos, Sofia Hernanz y Luz Seijo. También abstencionistas 'sanchistas' como Adriana Lastra y José Luis Ábalos.

UN REPERTORIO A LA IZQUIERDA

El 'repertorio' de Sánchez para esta nueva fase del PSOE, según recoge el texto, es un PSOE a la izquierda y que tenga fijados su dos grandes rivales: "el capitalismo neoliberal" y "el conservadurismo del PP". Lo que plantea el exsecretario general es una "alianza de progreso" con los sindicatos y con las otras fuerzas que busquen la "justicia social". No cita, pero todo el mundo da por hecho que se trata de Podemos.

Sánchez apuesta por un partido autónomo y libre de injerencias de las élites. Un PSOE que apueste por sus militantes y que funcione de "abajo hacia arriba". Todo este tipo de alusiones en el acto eran aplaudidas como un buen estribillo. El ex líder tiene como principal fuerza su hipotético tirón entre las bases frente al establishment que representa Susana Díaz -que todavía no ha despejado oficialmente la duda de si se presenta o no-.

Y, para el modelo territorial, su apuesta es una reforma constitucional federal, "manteniendo que la soberanía reside en el conjunto del pueblo español", que "debe perfeccionar el reconocimiento del carácter plurinacional del Estado apuntado en el artículo 2 de la Constitución".

La idea que tienen Sánchez y su equipo es que este texto pueda ser retocado con aportaciones de militantes, simpatizantes y otras organizaciones. De hecho, ha avanzando un próximo acto también en Madrid para debatir más en profundidad sobre él con los afiliados. Después servirá para presentar enmiendas en el congreso del partido -que se celebrará los días 17 y 18 de junio-. De esta manera, quiere neutralizar los documentos que está elaborando la gestora y que están siendo pilotados por Eduardo Madina y José Carlos Díez.

"PEEEEDRO, PEEEEDRO, PEEEEDRO"

Todo con la intención de que el PSOE "vuelva a ser el partido de la izquierda de este país". El de hoy es un "primer paso", ha relatado Sánchez, que se ha mostrado convencido de que en mayo ganará las primarias. "Peeedro, Peeedro, Peeedro", le animaba un completo patio de butacas, secundado desde los palcos y aplaudido desde el exterior.

"No soy la misma persona que hace dos años y medio, ni la misma persona que el uno de octubre y tampoco soy la misma persona que renunció al acta", ha confesado ante su enfervorecido público. Pero, ha agregado, cree saber "lo que necesita el PSOE y la izquierda para renacer y volver a ser la alternativa".

Sánchez cree saber "lo que necesita el PSOE y la izquierda para renacer y volver a ser la alternativa

Sánchez y su equipo salen de este lunes por la noche mucho más contentos. Querían una demostración de fuerza, marcar su territorio, animar a los suyos y resaltar ante su propio partido y los medios que hay agua en la piscina. Y, desde luego, han hecho mucho ruido y la sensación que dejan es que hay partido y tienen fuerza en esta batalla.

Además, el acto ha querido marcar ese carácter de izquierdas que imprimen a su candidatura -hasta con la propia elección del espacio, ligado a la intelectualidad madrileña-. El ex secretario general ha rechazado, para gusto de los oyentes, el modelo de "gran coalición" que impera en Europa al haber alimentado a "los populismos, a la ultraderecha y al extremismo".

Aplausos entre el público, los mismos que han cosechado sus referencias al laicismo, al federalismo y a la necesidad de recortar los plazos de las direcciones interinas de las gestoras -90 días-.

Sánchez se ha pintado esta noche de 'color esperanza'. No sabemos si desteñirá o volverá a pintar las paredes de la calle Ferraz. Pedro is back.