Trump prepara una operación de limpieza en sus servicios de inteligencia
El presidente de EEUU, Donald Trump, sigue en su línea: atacando a la prensa y, de paso, asegurando que encontrará a quienes hayan filtrado a la prensa información de su Gobierno y que "pagarán un gran precio", dado que considera que esas revelaciones son las responsables de la renuncia de Michael Flynn como su principal asesor de seguridad nacional.
"Vamos a encontrar a los responsables de las filtraciones y van a pagar un gran precio por haber filtrado" información, ha resaltadoTrump en respuesta a una pregunta de un periodista durante una reunión con miembros del Congreso en la Casa Blanca.
Sus palabras llegan justo cuando The New York Times y la CNN han informado de la maniobra que tiene entre manos el presidente: someter a revisión sus servicios de inteligencia. Algo inédito en la historia del país. Para llevar a cabo esta operación, pretende situar a Stephen A. Feinberg, un multimillonario de su máxima confianza y alejado de la órbita de la seguridad nacional. El golpe es, en definitiva, un recrudecimiento de la guerra que Trump tiene abierta con sus agentes secretos. La desconfianza es tal, que ambos medios estadounidenses aseguran que los servicios de inteligencia han decidido ocultarle información sensible para evitar su filtración.
Pero a él todo esto le da igual y se ha limitado a seguir, de cara a las cámaras, con sus acusaciones. Así, ha señalado a los "falsos" medios de comunicación y a las filtraciones "ilegales" de información como culpables de la renuncia de Flynn, quien abandonó su cargo el pasado lunes por haber mentido al vicepresidente de EEUU, Mike Pence, y a otros altos cargos del Gobierno sobre sus contactos con Rusia.
LAS ACUSACIONES DE TRUMP
Aunque la Casa Blanca ha asegurado que el propio Trump pidió la renuncia de Flynn porque había perdido la confianza en él, el mandatario indicó el miércoles que los medios habían "tratado muy, muy injustamente" a su exasesor, de quien dijo que es un hombre "maravilloso".
Según algunos informes de prensa, Pence no conoció toda la información sobre los contactos de Flynn con Rusia hasta que el diario The Washington Post la hizo pública la semana pasada, en un artículo en el que citaba a "nueve funcionarios y exfuncionarios" estadounidenses.
Ese es solo uno de los muchos detalles sobre fricciones dentro del Gobierno de Trump que han aparecido en la prensa estadounidense aparentemente gracias a filtraciones de funcionarios, algo que ha irritado profundamente al presidente.
"Las filtraciones, e incluso las filtraciones ilegales de asuntos clasificados, han sido un gran problema en Washington durante muchos años. ¡El fracasado New York Times (y otros) deben disculparse!", ha manifestado este jueves Trump en un tuit.
"¡Por fin se está prestando atención a los desgraciados que filtran información! ¡Les cazaremos!", escribió Trump en otro tuit.
Las tensiones en torno a las filtraciones parecen haber empeorado la ya difícil relación de Trump con los servicios de inteligencia del país, que, según informa este jueves el periódico The Wall Street Journal, le están ocultando algunos datos sensibles por miedo a que salgan a la luz.