Una 'tormenta perfecta' excepcional que bloquea las comunicaciones en la península
El temporal de frío y nieve que azota estos días buena parte de España ha dejado mucho más que bellas estampas blancas, muñecos de nieve y carámbanos de hielo. Esta vez, la sucesión de oleadas de frío del norte de Europa y borrascas mediterráneas ha provocado "dificultades históricas", en palabras del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna: casi 4.800 viajeros afectados, interrupciones en el transporte de trenes y autobuses, atascos kilométricos y miles de usuarios sin suministro eléctrico.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha trasladado su solidaridad a las personas que se han visto afectadas y De la Serna, en un gesto poco común en política, hasta ha pedido disculpas a quienes quedaron atrapados en carreteras y trenes tras las intensas nevadas de las últimas horas.
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Ha habido, en efecto, nevadas en provincias donde hacía décadas que no caía un copo de nieve, incluso en zonas muy cercanas al mar en numerosas localidades de la costa de España. Según el titular de Fomento, es como si se hubiera dado la tormenta perfecta: zonas que no veían nevar en más de 30 años, una gran extensión de territorio afectado por el mal tiempo y un volumen de nieve insólito. Más detalles aportará en su comparecencia en el Congreso de los Diputados para dar cuenta del caos de este viernes, unas explicaciones que complementará el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido.
Las interrupciones más importantes en lo que al transporte por ferrocarril se refiere se han producido en la provincia de Albacete (centro de España) y sus conexiones con Madrid y con Valencia (este del país), que han afectado a más de 5.000 personas.
Las copiosas nevadas registradas en Castilla-La Mancha (centro) han dejado además sin luz a 20.000 vecinos de la región, si bien se está recuperando la normalidad de forma paulatina, y unas 32.000 personas se han visto afectadas por cortes de luz en la zona de Valencia tras caerse una torre eléctrica.
VALENCIA SE LLEVA LA PEOR PARTE
En cuanto a las carreteras, el Gobierno informó de que se han habilitado casi 1.400 máquinas quitanieve; se han aplicado tratamientos preventivos sobre más de 25.000 kilómetros de vías; se ha retirado nieve en cerca de 6.400 kilómetros, y se han esparcido 5,4 millones de litros de salmuera y 7.000 toneladas de sal. Un amplio dispositivo que, sin embargo, no ha servido para el mayor de los caos de la jornada, el de Valencia y su A-3.
Aquí se han producido circunstancias de carácter "extraordinario", ha reconocido De la Serna en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Y así ha comenzado a relatar una auténtica película de esas de grandes cataclismos, en las que parece que se va a acabar el mundo. "A pesar de la nieve se circulaba con normalidad -ha relatado- y a las 17.58 horas hubo un accidente que provoca un atasco y el bloqueo de la carretera. A esta circunstancia se suma que diversos camiones, fruto del atasco, tienen accidentes que hacen que queden cruzados en el entorno de la carretera. Por si esto fuera, poco se ha producido la caída de un poste eléctrico. Todas estas circunstancias han hecho que fuese imposible acceder con los vehículos de limpieza y numerosos vehículos han quedado retenidos en estos dos tramos".
No ha sido hasta primera hora de la tarde, desde la tarde-noche del jueves, cuando la A-3 ha quedado nuevamente abierta a los turismos, no así a los camiones.
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Hasta la Unidad Militar de Emergencias trató de llevar mantas y comida a los miles de afectados, sin éxito hasta bien entrada la mañana. Fuentes de la Delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana dijeron a EFE que algunos coches y camiones se "colaron" en la carretera pese al corte y acabaron cruzados, hechos tijeras o provocando pequeños choques en cadena.
Un total de 220 personas, entre ellas 70 agentes de la Guardia Civil, 49 militares, 60 de Carreteras y 12 quitanieves, han trabajado durante en la zona para intentar atender y sacar a los coches atrapados.
Pese a este esfuerzo, los testimonios de los conductores atrapados estaban marcados por la indignación y la angustia, como demuestran estas llamadas al programa Hablar por hablar de la Cadena SER. "Estamos sin agua, sin luz, sin poder ir al servicio... no tenemos ningún tipo de ayuda de nadie... Llevo más de 20 horas parado", explica uno de los camioneros afectados.
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Fomento ha reconocido que, ante la magnitud del temporal, va a haber que "revisar" los protocolos de actuación de emergencias para que colapsos de este tipo no se repitan.
Hasta 50 carreteras, la mayoría secundarias, han quedado parcialmente cortadas en el día de hoy en 15 provincias diferentes, sobre todo por culpa de la nieve y el hielo, de lo que se ha dado profusa cuenta en las redes sociales:
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LO QUE ESPERA LA AEMET
Las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) adelantan que el temporal irá remitiendo en los próximos días, sobre todo en las zonas más castigadas, como el habitualmente soleado Levante español, donde viven miles de residentes extranjeros.
"Si no es imprescindible viajar por carretera es mejor no hacerlo, todavía hay que tener cuidado con el hielo, revisar los anticongelantes de los vehículos, llevar teléfono con batería de reserva, llevar ropa de abrigo en el coche, en caso de quedarse bloqueado siempre mirar que no está tapado el tubo de escape...", ha recordado, no obstante, Íñigo de la Serna.