Primer acto, segunda escena: el PP cede ante el PSOE y accede a suavizar la reforma laboral
Primer acto, primera escena: subida del 8% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Con todas sus reservas. Primer acto, segunda escena: mejora de la reforma laboral de 2012. Con todas sus otras reservas.
A ojo de buen cubero, el PSOE suma dos tantos ante su electorado. A vista de pájaro, ninguno de los puntos le lleva a ganar el partido. La subida del SMI lleva aparejada una disposición adicional para evitar el contagio de este alza a la negociación colectiva. Los 168 síes del Congreso a la derogación de la reforma laboral se desligan del enunciado. En lenguaje parlamentario: "queda acotado al compromiso del PP a iniciar las mejoras en el marco de las relaciones laborales necesarias acordadas en el marco del diálogo social y parlamentario". El grupo popular entra en escena con esta enmienda presentada a última hora de este martes 13 y que justifica como una “mejora técnica”, pero que en realidad deja en agua de borrajas la iniciativa socialista, líquido que el PSOE ya había descontado de su representación.
El PP, también consciente del sentir de la mayoría del arco parlamentario, ha realizado esta propuesta a cambio de que no se produzca la derogación de la reforma laboral y se compromete a "evaluar su impacto" y a "abrir un debate sobre el futuro del mercado laboral en nuestro país", conclusiones que deberían estar preparadas en el primer trimestre de 2017.
SIMANCAS, POCO A POCO
La iniciativa, que ha sido defendida por el portavoz socialista de Empleo, Rafael Simancas, ha sido apoyada además por Unidos Podemos, ERC, Compromís y el PNV, y ha contado con la abstención del PDCat y Ciudadanos y el voto en contra del PP. Simancas ha argumentado que el PSOE no busca derogar todas las normas laborales "de un plumazo" sino analizar las medidas más lesivas y dialogar nuevos cambios con los agentes sociales y con las formaciones políticas.
"La reforma del PP sólo ha traído paro de larga duración, más pobreza laboral y precariedad", ha subrayado, tras añadir que hay que simplificar los tipos de contratos y acabar con la descausalización de los despidos. Simancas ha incidido en que la negociación colectiva no puede ser el "poder unilateral del patrón" para imponer horarios y en este sentido ha recordado a la ministra de Empleo, Fátima Báñez, que la racionalización de los horarios también pasa por "derogar su reforma". "Que acordemos un Estatuto que simplifique los contratos y que sea fruto del Diálogo Social y político", ha dicho Simancas, informa Efe.
El texto final aprobado es fruto de una enmienda transaccional del PSOE, Unidos Podemos y el PNV que "salva" algunos de los preceptos incluidos en la reforma laboral del PP. Así, se excluyen de esa futura derogación aquellas medidas para mejorar la conciliación de la vida laboral y familiar y actualizar la legislación laboral.
NUEVO ESTATUTO DE LOS TRABAJADORES
En cuanto al nuevo Estatuto de los Trabajadores, el texto aprobado remarca que deberá tener en cuenta la jurisprudencia sentada por el Tribunal Supremo y por las recientes sentencias europeas que piden acabar con la discriminación existente entre los trabajadores temporales y los indefinidos para equiparar sus derechos.
En el mismo sentido, la proposición no de Ley contempla adoptar las medidas oportunas para incrementar en los Presupuestos Generales del Estado de 2017 los recursos destinados a políticas activas de empleo.