Los 3 pasos que debes seguir para que Hacienda te devuelva el IRPF de tu prestación por maternidad
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha emitido este lunes una sentencia en la que da la razón a una contribuyente y ordena a Hacienda que le devuelva el importe del IRPF de su prestación de maternidad. Este fallo sienta jusrisprudencia sobre la exención del IRPF de este tipo de prestación, a la que ya se han opuesto los Técnicos de Hacienda (GESTHA).
Según Legálitas, cualquier contribuyente en la misma situación que la artífice de la demanda puede reclamarle al fisco la devolución del importe retenido en concepto de IRPF. Estos son los tres pasos a seguir:
1. Presentar una solicitud de rectificación y devolución de ingresos indebidos
El primer paso es presentar un escrito de solicitud de rectificación y devolución de ingresos indebidos, ante nuestra delegación de hacienda, haciendo constar el ejercicio que se reclama y concepto jurídico.
2. Agotar la vía administrativa con alegaciones y recursos
Lo más probable es que nos contesten desfavorablemente, por lo que deberemos presentar alegaciones y recursos a todas las resoluciones en las que nos denieguen nuestra petición hasta que finalice la vía administrativa.
Con el escrito del punto anterior habremos abierto la vía administrativa, por la cual la administración nos contestara probablemente desestimando y nos dará un plazo de 10/15 días para interponer alegaciones. Alegaciones que presentaremos y que lo más seguro sean igualmente desestimadas.
Un vez contestadas las alegaciones podremos interponer recurso de reposición y acontinuación Reclamación Económico Administrativa que será resuelta esta última por el Tribunal Económico Administrativo Regional correspondiente y fallaran probablemente en contra, desestimando nuestra pretensión y así agotando la vía administrativa.
3. Reclamar judicialmente
Finalizada la vía administrativa podremos iniciar un procedimiento judicial que es dónde más viabilidad tiene este procedimiento, para lo cual tendremos dos meses para interponer un recurso contencioso administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia correspondiente, y así veremos si dicho tribunal nos da o no la razón.
Antes de iniciar la vía judicial, es aconsejable valorar cada caso porque no siempre va a compensar.
