Bolt gana en los 100 metros con un tiempo de 9,81
'El Rayo' sigue siendo el hombre más rápido del mundo. Usain Bolt volvió a demostrar este domingo que no tiene rival, que recorre 100 metros en apenas un suspiro, que sus oponentes poco pueden hacer más que verle pasar como exhalación. El jamaicano ganó de nuevo el oro en la prueba reina del atletismo con un tiempo de 9,81 y es su tercera victoria consecutiva en unas Olimpiadas, algo que nadie había conseguido antes.
Bolt ya había sembrado el pánico entre sus oponentes apenas una hora antes, en las semifinales. Allí salió mal, se dejó llevar al final y entró en la meta casi frenando, mirando a los lados y sonriendo. Como quien pasea por su calle saludando a los vecinos. Y, con todo, dejó una marca de 9,86. Para echarse a temblar, más que para salir corriendo.
La final siguió un patrón similar. Bolt salió regular y a mitad de carrera parecía que el estadounidense Justin Gatlin podía quitarle el oro. Pero no. El jamaicano tiene una zancada kilométrica y la hizo valer. Al final entró en la meta con una buena ventaja. Gatlin fue plata con 9,89 y el canadiense Andre de Grasse completó el podio con 9.91.
El estadio olímpico rugió así de alegría. El público brasileño no ocultó en ningún momento su preferencia por Bolt, al que aplaudía cada gesto, cada mirada, cada parte de su show.
Al otro lado, Gatlin era abucheado a la mínima. Muchos aficionados siguen preguntándose, de hecho, cómo es posible que el norteamericano siga corriendo tras haber cumplido una sanción de cuatro años por dopaje.
Bien es cierto que la marca de 9,81 de Bolt está lejos de sus mejores tiempos. No se acerca a su récord del mundo, que en 2009 estableció en 9,58, ni tampoco a su marca de Pekín (9,69) y menos a la de Londres (9,63). Pero el jamaicano ya es leyenda a pesar de que hace sólo un mes había tenido problemas físicos.
Bolt mira ahora hacia adelante porque su show en Brasil no ha terminado. Se enfrentará en los próximos días a su prueba favorita, la de 200 metros, en la que no descarta batir su propio récord del mundo. Y también le queda el 4x100. Si gana todos esos oros, acumularía 9 en tres Juegos. Irrepetible.