Polémica en Etiopía por la actuación de su nadador Robel Kiros Habte
El nadador etíope Robel Kiros Habte ha triunfado estos días en las redes sociales, aunque no por sus méritos deportivos, sino por su discretísima actuación en los Juegos Olímpicos. Hizo un tiempo de 1.04.95, 18 segundos más lento que el ganador de su serie de los 100 metros.
El vídeo de la prueba habla por sí solo. Además, Kiros también llamó la atención por su físico, algo alejado del típico cuerpo musculado que acostumbran a enseñar los nadadores.
Algunos alabaron al nadador porque, afirmaban, representa el espíritu olímpico y hacía cierto el dicho de que lo importante es participar. Pero ahora muchos en Etiopia cargan contra él no tanto por su actuación sino por los motivos por los que Kiros ha acudido a los Juegos.
Varios medios de comunicación han subrayado que Robel Kiros Habte es el hijo de Kiros Habte, presidente de la federación etíope de natación, lo que habría facilitado mucho su pase a Río.
"(Robel) es un símbolo del racismo, el favoritismo y la incompetencia contra la que estamos luchando", aseguró en Twitter Lina T., una residente en Addis Abeba, en referencia a las protestas contra el Gobierno reprimidas violentamente en Etiopia en las últimas semanas.
El nadador se ha convertido en un tema de discusión en las redes sociales, donde muchos usuarios exigen ya la renuncia del presidente de la federación de natación, un deporte poco común en la zona. Algunos no entienden cómo Robel Kiros Habte, de 24 años y sin experiencia en la competición deportiva, tuvo el honor de ser el abanderado de Etiopía, un país que cuenta con destacados corredores de fondo y medio fondo.
"No está bien humillar a una nación participando en una competición sin tener ningún tipo de habilidad", se queja en Facebook Seble T, otro residente en la capital. "Es triste tener a tantos Robel en el sistema. Es el momento de darse cuenta", añade.
Mientras, el presidente de la federación de natación se limitó a recordar que el país acudía a las competiciones acuáticas sin ninguna aspiración, solamente para disfrutar de la participación.
Tras la polémica, Etiopía espera ahora que lleguen las primeras pruebas de atletismo, donde sí podrá destacar. Y eso a pesar de que la Federación de Atletismo del país ya ha sufrido acusaciones de nepotismo antes de los Juegos Olímpicos, al haber excluido al triple medallista olímpico Kenenisa Bekele.