Cuatro consejos para sobrevivir a los baños de un festival
Ya has llegado, has montado la tienda, te has calzado tus botas de caucho o chanclas (en su defecto), has sacado tus gafas de sol y has cargado el vaso con cerveza para que la sed no te amenace en ningún momento. Por fin estás preparado para asistir al primer concierto del festival de turno. Luego vendrá un segundo, y después otro concierto. Ahí llega EL momento fatídico. El de entrar a... ¡LOS BAÑOS!
No hace falta profundizar en detalles. Seguro que sabes bien a lo que nos referimos. De ahí que propongamos esta pequeña guía para enfrentarse al momento baño festivalero.
1. PREPARAR UN KIT DE SUPERVIVENCIA
Es la base de la base. Si te preocupa la higiene, no te lances a los baños —ya sean portátiles, sumideros o baños secos ecológicos— sin tomar ciertas precauciones a menos que los acaben de limpiar.
Es imprescindible tener a mano un rollo de papel y/o un paquete de pañuelos. En caso de falta de jabón, lo cual acabará ocurriendo de un momento a otro, no olvides llevar provisiones de gel desinfectante o de toallitas húmedas (las toallitas de bebé harán el apaño para todo el festival).
2. UTILIZAR UN SISTEMA PARA HACER PIS DE PIE
Este producto podría cambiar la vida de todos aquellos que no están dotados de pene. Reconozcámoslo: poder orinar de pie es como un sueño cuando primero hay que hacer cola para acceder a los servicios y después toca enfrentarse a una taza asquerosa, o cuando hay que esconderse entre los matorrales y ponerse de cuclillas en pleno paseo de senderismo.
El dispositivo conocido como Pisse-debout, un invento revolucionario hecho de silicona reutilizable o de cartón desechable, permite a todas las mujeres orinar como los hombres. Así lo demuestra el siguiente vídeo:
3. EN CUCLILLAS
¿No soportas sentarte en aseos sucios? ¡Buenas noticias! La posición de cuclillas contribuye a reforzar la musculatura de los muslos. Entrénate por adelantado para evitar las agujetas entre concierto y concierto.
Y otra buena noticia: los expertos coinciden en señalar que en esta postura es más fácil eliminar los excrementos. Así que todo son beneficios.
Pero si no eres capaz de aguantar en cuclillas, siempre se puede recurrir a un cubreasiento.
4. NO RESPETAR LA SEPARACIÓN HOMBRE/MUJER
El último consejo, más que en cuestión de higiene, es para evitar las interminables colas de espera del lado de las mujeres. ¡Atrévete a abolir la división entre hombres y mujeres! Es muy probable que los baños de hombres tengan meaderos además de tazas clásicas, lo que les hace ganar mucho tiempo...
"En la práctica cotidiana, todos lo hacemos. ¿Quién no ha ido nunca al lavabo que no le tocaba? ¿Y dónde está la gravedad del asunto? Para mí, no es un problema", comentaba recientemente al HuffPost Francia Arnaud Alessandrin, sociólogo especialista de género.
Este artículo fue publicado originalmente en la edición francesa del 'Huffington Post' y ha sido traducido del francés por Marina Velasco Serrano