Barack Obama en España: menos de 24 horas 'non stop'
Primero como "mochilero" y luego a bordo del Air Force One convertido en el hombre más poderoso del mundo. Así de dispares han sido las dos únicas ocasiones en las que Barack Obama, el actual presidente de Estados Unidos, ha estado en España. Separados por un periodo de 28 años, ambos momentos comparten algo: lo simbólico y emocionante de su visita. Fue en Madrid desde donde un muy joven Obama partió para viajar a Kenia y conocer sus orígenes y ha sido aquí también donde, siete años después de asumir su mandato, ha saldado su deuda -política- con España.
Han sido menos de 24 horas lo que ha durado su visita oficial, pero a Obama le ha cundido. Obligado a recortar su agenda tras el tiroteo en Dallas, el presidente de Estados Unidos ha podido reunirse con el rey, el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, y mantener breves encuentros con los líderes de PSOE, Podemos y Ciudadanos en la base aérea de Torrejón de Ardoz. Los tres han celebrado la oportunidad de hablar con el presidente, tal y como han expresado en sus perfiles de Twitter, mientras que Iglesias ha cumplido con lo que ya parece un ritual: regalarle un libro.
La brevedad del encuentro entre Obama y los tres políticos -han sido menos de diez minutos- se ha debido a su intensa agenda -llegó el sábado a las 23.00-, que ha provocado que el presidente de EEUU haya partido con más de una hora de retraso respecto a lo previsto hacia la base gaditana, última parada antes de volver a su país, y visita con la que se ha convertido en el primer presidente de EEUU en visitarla.
ESPAÑA Y EEUU
Obama vuelve a casa tras dejar un mensaje claro, que ha repetido tanto ante el rey como ante el presidente del Gobierno en funciones: "sea cual sea" el color del nuevo gobierno de España "podrá contar con Estados Unidos". Prueba de ello es que ha dicho que no quiere que vuelvan a pasar "otros 15 años" hasta que un mandatario estadounidense vuelva a pisar suelo español. Todo ello sin dejar de lado la que es una de sus características: el humor.
Lo ha demostrado ante el rey en el imponente espacio del Salón de Columnas del Palacio Real, donde ha sido agasajado con una especial bienvenida y en el que ha recordado su pasado "mochilero" en España. "La primera vez que estuve en Madrid no vine en el Air Force One, era joven, llevaba una mochila a la espalda, iba andando a todas partes y comía en plan barato", ha dicho Obama generando risas entre las dos delegaciones de autoridades de España y los EEUU. Durante la aproximadamente hoya y media que ha durado el encuentro entre ambos, se ha comprobado la sintonía existente entre ambos, ofreciendo Obama un aspecto relajado y conversador, pese la intensidad de su agenda. Los dos han recorrido las principales estancias del Palacio de Oriente y ha improvisado unas palabras de bienvenida en respuesta al breve discurso leído por Felipe VI en el Salón de Columnas, sede de importantes acontecimientos históricos.
Obama y el rey en el Palacio Real este domingo
Prueba de los vínculos entre ambos, el rey le ha regalado un ejemplar en inglés del Quijote editado por Penguin y traducido por John Rutherford, encuadernado en piel de forma artesanal. El volumen incluye una dedicatoria con las firmas del Felipe VI y la Reina Letizia en la que se menciona, como informa la agencia Efe, la famosa cita sobre la libertad que figura en el capítulo 58 de la segunda parte del Quijote: "La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos".
"VOLVERÉ"
Desde el imponente Palacio Real Obama se ha dirigido al Palacio de La Moncloa, donde Rajoy le esperaba. Ambos han mantenido un encuentro de unos 45 minutos, en los que han tratado asuntos internacionales centrados en las consecuencias del Brexit, la situación en Venezuela, la OTAN, o las elecciones en Colombia y la situación electoral en España. El presidente de EEUU ha reiterado que no importará "el color" del nuevo Gobierno, mientras que su homólogo español le ha asegurado que hará "todo lo posible" por formar gobierno. "Unas terceras elecciones sería una broma de mal gusto", ha sentenciado Rajoy.
La situación económica también la han tratado ambos mandatarios, momento en el que Obama ha felicitado al presidente del Gobierno y a los españoles por el "progreso económico de los últimos años", aunque ha advertido que "debe seguir mejorando" en aspectos como el desempleo juvenil.
Ambos han aprovechado el encuentro para reiterar ante los medios que las relaciones entre los dos países pasan por un momento "magnífico", momento en el que Obama ha valorado la colaboración de España con EEUU y con la OTAN, especialmente en lo referente a las bases de Morón y de Rota y la participación española en la formación de policías y militares en países de Oriente Próximo. Además, el presidente ha incidido por otro lado en la importancia de la alianza y las buenas relaciones entre España y EEUU, tanto por la afinidad en sus "intereses, valores e ideales" como por la gran comunidad hispanohablante presente en EEUU y la influencia española en Iberoamérica.
Obama y Rajoy tras su encuentro
Y, de nuevo, el humor para cerrar el encuentro. Obama ha prometido que volverá a España "como expresidente". Ha tirado de 'topicazos', sí, alegando que España es "preciosa" y que su cultura, su gente y su clima son algo "irresistible", pero también quiere volver porque tanto a su mujer como a sus hijas les encanta. "Mis hijas están creciendo y si les decimos que venimos a España, seguirán queriendo pasar tiempo con sus padres, no habrá que convencerlas", ha confesado entre risas.
De Moncloa Obama también se ha ido con un regalo: con un jamón, detalle que ha correspondido con una caja de cristal con el escudo americano y que, al abrirla, tiene la firma del mandatario norteamericano en la tapa.
Obama abandona Madrid para dirigirse a Rota
Hasta aquí ha sido su agenda institucional. Ya en camisa, sin su americana, Obama ha llegado a la base de Torrejón, desde donde ha partido a Rota, su última parada en esta visita oficial. En el aire queda ahora su promesa de volver, pero, de momento, Obama se ha sumado el tanto de romper con los largos 15 años que España ha estado si recibir a un mandatario estadounidense.