La noche que Meryl Streep se convirtió en Donald Trump
Meryl Streep puede ser quien quiera. Desde una bruja en el bosque a un ama de casa del Estados Unidos más profundo, una baronesa en pleno corazón de África, una cocinera de los años cincuenta, una oscura monja o una retorcida y estilosa editora de moda. Pero lo que no había sido nunca era un político gordinflón, rubio, de piel rojiza y que genera tantos odios como pasiones. Meryl Streep nunca había sido Donald Trump. Hasta este lunes.
Porque la noche del lunes la actriz ganadora de tres Oscar —y nominada en total en 19 ocasiones— se puso en la barriga piel del magnate Donald Trump, aspirante republicano a la Casa Blanca en las elecciones del 8 de noviembre. Lo hizo en una gala celebrada en el Public Theatre de Nueva York. Allí se subió al escenario junto a la también actriz Christine Baranski para interpretar juntas una canción.
Ataviada con una peluca rubia de imponente flequillo, un traje de chaqueta y una larga corbata roja, Streep entonó Brush up your Shakespeare, un tema de Cole Porter parte del musical clásico Kiss Me, Kate, que fue el primero en ganar el Tony al Mejor Musical, allá por 1949.
La letra de la canción no podría ser más certera, como bien explica la web de Vanity Fair. "You'll let me know, why all the women say no / Dime por qué todas las mujeres me dicen que no", canta Streep/Trump, mientras que Baranski le responde: "Just declaim a few lines from Othella, and they'll think your a hell of a fella / Solo recita unas líneas de Otelo y pensarán que eres un hombre cojonudo".
Pocos habrían imaginado a Streep disfrazada de Trump. Ella ha declarado en más de una ocasión sus simpatías por la demócrata Hillary Clinton, y en 2014 confesó que le gustaría que la actriz de Memorias de África o Kramer contra Kramer interpretara su vida en la gran pantalla. Muy, muy lejos de Trump.
Streep y Clinton, juntas en una entrega de premios en 2012.