7 cosas que los sindicatos exigen al próximo gobierno
No es un Primero de Mayo más. El Día del Trabajo coincide este año con la víspera de la disolución de las Cortes y la proximidad del inicio de la campaña electoral. Los sindicatos se mueven entre la esperanza en que el próximo Gobierno de un giro a las políticas sociales del PP y el temor a que los ‘populares’ sigan en el poder y continúen con la misma dinámica de recortes de los últimos cuatro años.
UGT y CCOO pretenden que las manifestaciones de este domingo sirvan como escaparate para que sus reivindicaciones marquen el inicio de la carrera hacia las urnas. Y avisan de que lo piden es fundamental. “Si el próximo Gobierno no hace caso, este país estará cogiendo números para ir a un grave conflicto social”, advierte a El Huffington Post Ramón Górriz, secretario de Acción Sindical de CCOO, quien asegura que es imposible que siga aumentando la pobreza, la exclusión y que se reduzcan los servicios públicos y los sociales sin que “pase nada en el conflicto entre trabajo y capital”.
Pero, ¿qué exigen los sindicatos al próximo gobierno? Estas son algunas de sus reivindicaciones fundamentales:
María del Carmen Barrera, secretaria de Políticas Sociales, Empleo y Seguridad Social de UGT, subraya que este debe ser el punto sobre el que gire toda la acción del próximo Gobierno en materia de empleo. Por eso, exige que se deroguen las dos últimas reformas laborales, y no únicamente la del PP, “porque la calidad ínfima del empleo que se está creando viene condicionado” por ambas.
Precisamente este fue uno de los puntos por los que la propuesta de pacto de Compromís fracasó esta semana. La formación exigía la derogación de las dos últimas reformas laborales, pero el PSOE sólo accedía a tumbar la del PP. Górriz, de CCOO, subraya que fueron ambas normas las que “rompieron el equilibrio en las relaciones laborales”.
CCOO subraya que los empresarios ya han recuperado sus beneficios durante el último año, por lo que llama a incrementar ahora los salarios de los trabajadores. “Así también aumenta el poder adquisitivo, se recupera el consumo, sube la demanda y se va consolidando el crecimiento económico”, apunta Górriz, quien exige que el Salario Mínimo Interprofesional suba desde los 655,20 euros mensuales actuales hasta los 800.
“Es una de las cuestiones centrales para empezar a reducir la brecha de la pobreza y la desigualdad”, sostiene el dirigente de CCOO, que recuerda algunos datos. Por ejemplo, que España es el país de la OCDE donde más ha crecido la desigualdad durante la crisis, tan sólo por detrás de Chipre y superando hasta en catorce veces a Grecia, según un informe reciente de Oxfam Intermon. Además, en 2014 había 13,4 millones de personas en riesgo de exclusión, según el mismo documento.
María del Carmen Barrera, de UGT, subraya que de poco vale aumentar el Salario Mínimo si antes no se derogan las reformas laborales. “Las trampas de esas normas hacen que muchos trabajadores ni siquiera cobren ese mínimo”, apunta.
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Manifestación del 1 de mayo de 2015 en Madrid.
Barrera subraya que el Gobierno del PP “prácticamente ha acabado con las políticas activas de reinserción”. Por eso, explica, habría que “rehacer de nuevo todo el sistema”, que es especialmente importante en un momento en el que España acumula 4.791.400 parados, según la EPA publicada esta misma semana. “Lo primero que hizo el PP fue despedir a los orientadores laborales y es muy difícil que sin ellos se acometan políticas activas de empleo”, destaca.
Recuerda que casi un millón y medio de desempleados provienen del pinchazo de la burbuja y hay muchos desempleados que “eran chavales jóvenes que abandonaron los estudios para acudir a empleos fáciles en la construcción, que no tienen formación alguna”.
“Si no se cuida la formación, si no existen orientadores laborales, si no hay políticas activas… ¿Hacia dónde vamos?”, se pregunta antes de asegurar que ella es incapaz de decir exactamente qué es lo que hacen los servicios públicos de empleo a la hora de acometer la reinserción.
UGT alertó hace unas semanas de que hay 121.571 personas sin ningún tipo de cobertura de desempleo y de que el 40,9% del total de beneficiarios de prestaciones son de carácter contributivo, que se encuentran "en mínimos".
Por eso, Górriz, de CCOO, subraya que España necesita plantear “un nuevo sistema de protección a las personas desempleadas”. “El actual se creó para la época de la reconversión industrial, pero no está preparado para una crisis que dura ya ocho años”, explica mientras lamenta que “cuando hay más paro hay menos recursos para las personas en desempleo”. “Es algo que nadie puede entender”, zanja.
Barrera, de UGT, resume la situación en que “la cobertura por desempleado no llega casi a nadie”. “Solo se puede medir en términos de pobreza y sufrimiento real”, lamenta.
Barrera recuerda que las últimas reformas laborales desequilibraron mucho las relaciones entre empresarios y trabajadores. “La negociación colectiva es el instrumento que equilibra el poder empresarial otorgando poder a la representación de los trabajadores”, explica. Y lamenta que las reformas desequilibraron mucho “ese poder que tenían los representantes de los trabajadores a la hora de negociar frente a la empresa”.
Una opinión que comparte el representante de CCOO, quien subraya que es urgente un giro de la política económica y social. “Eso pasa por recuperar el diálogo social, la negociación colectiva, planteando claramente que vuelva el equilibrio en las relaciones laborales”, asegura.
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Manifestación del 1 de mayo de 2015 en Madrid.
Górriz recuerda que, desde verano, la mayoría de los afiliados a la seguridad social son personas con contratos temporales y, sobre todo, a tiempo parcial. Y que la mayoría de “los sufridores de esos contratos” son mujeres, jóvenes e inmigrantes. “Esto tiene, además, graves repercusiones sobre el sistema. Si los ingresos son débiles por las cotizaciones sociales y los salarios, quien se resiente es la seguridad social”, advierte.
Barrera, de UGT, advierte de que la mala calidad del empleo es consecuencia directa de las reformas laborales y califica la situación de “insoportable”. “Si hay un gobierno, querríamos que fuera sensible a estas situaciones. Si vuelve a gobernar el PP estas políticas van a continuar y se va a llegar a una fractira social porque el país así no tiene futuro ni sociedad”, avisa.
Los datos respaldan a los sindicatos. La calidad del empleo en España se sitúa entre las más bajas de la OCDE, una organización que advierte de que España es el país donde más ha crecido la inestabilidad laboral desde 2007 hasta 2013.
Barrera, de UGT, afirma que España es el país de Europa donde más ha crecido la desigualdad durante la crisis y que la brecha no ha dejado de crecer. “No se ha hecho nada durante el Gobierno del PP. No hay ni una medida que haya sido eficaz”, critica.
Los datos, desde luego, respaldan la afirmación. Según Eurostat, en España el porcentaje de diferencia entre lo que cobra un hombre y una mujer es el 19,3%, Mientras que la media europea es del 16,3%. La EPA refleja, además, que entre 2009 y 2015 la cifra de las mujeres en el paro ha crecido 5,42 puntos, mientras que la de hombres sólo ha aumentado 3,13 puntos.
Mucho trabajo por hacer. Quien quiera llegar al Gobierno… puede empezar a remangarse.