España, potencia 'gastro'
Estas semanas de Fitur, Madrid Fusión, gastroencuentros y cibergastro, los datos son la mejor forma de poner en perspectiva lo que implica ser un país que lidera el turismo de restauración en el mundo.
De los más de 75 millones de turistas que acogió España en el 2014, hasta nueve millones vinieron sólo para comer en sus restaurantes más famosos. Son datos del IE Gastronomy, la unidad del IE Business School destinada a estudio de los subsectores del lujo, su impacto económico y el emprendimiento.
El 7,14% del PIB de nuestro país corresponde al mundo de la hostelería. En España hay tres millones de empresas que se dedican a la gastronomía de las que el 99% son pymes, muchas de las cuales fueron e incluso aún son proyectos de emprendedores.
Somos por lo tanto una potencia en materia gastronómica. Los hermanos Roca, que recientemente han pasado por Nueva York presentando un proyecto solidario, explicaban cómo su restaurante, El Celler de Can Roca, heredado de sus padres, había revitalizado el barrio y la ciudad de Girona gracias a la fama internacional del que para muchos es el mejor restaurante del mundo.
Jordi Roca, en esta edición de Madrid Fusión, junto a Neil Harbisson
El restaurante de Dani García en Marbella, con dos estrellas Michelin, recibe diariamente a multimillonarios de todo el mundo que se desplazan sólo para cenar los platos del cocinero.
Paco Roncero explicaba hace unos meses que "la cocina española es lo que es gracias a la generosidad de grandísimos cocineros liderados por Ferrán Adriá". Y lo cierto es que la escuela de Adriá, considerado el mejor chef del mundo, ha hecho de la Marca España un sinónimo de comer bien, de forma vanguardista e innovadora. Otras celebrities de los fogones son David Muñoz con su DiverXO; Paco Pérez, el cocinero que tiene en su haber cinco estrellas Michelin, y otro de los grandes, Martín Berasategui.
David Muñoz, en la cocina de DiverXO en una imagen de archivo
España cuenta con ocho restaurantes de tres estrellas Michelin y con 140 restaurantes con estrella, lo que sitúa a nuestro país como sexto del ranking mundial. Todos estos establecimientos son puntos no sólo de buena mesa, sino también de revitalización económica de aquellos lugares en los que están situados. Ponen de moda la agricultura de la tierra y los productos de altísima calidad de la huerta. Son miniempresas tractoras que arrastran tras de sí historia, calidad, lujo y desarrollo.
Carla Bulgaria asistía hace unos días al Ciclo Cocina y Arte Culinario, organizado por la Fundación Caja Murcia. Experta en cibergastro, asegura que ésta es "la nueva comunicación gastronómica a través de internet ha democratizado la cocina, nos ha acercado a nuestra cultura culinaria y ha recuperado el interés por la alimentación de forma global".
En Nueva York se encuentra la única estrella Michelin de un joven cocinero español fuera de España. Se llama Manuel Berganza, es asturiano y chef de Andanada141. En la ciudad que nunca duerme y en la que aún no había conseguido triunfar ninguno de los grandes españoles, este joven tan descarado como simpático, ha puesto de moda el cocido madrileño y el roscón de Reyes en la Gran Manzana y todo con la colaboración de un equipo de pinches españoles.
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