Un hombre lleva 13 años en Guantánamo por un error en su nombre
Las autoridades militares estadounidenses han admitido que han mantenido detenido durante 13 años en la prisión de Guantánamo a un supuesto islamista al que había confundido con un miliciano que luchó con Al Qaeda en Afganistán. Pensaban que había trabajado en la red terrorista internacional como correo y como instructor, según ha https://www.huffingtonpost.es/2014/04/15/ruz-guantanamo_n_5152241.html el diario británico The Guardian.
Las autoridades han reconocido durante una vista judicial en Guantánamo que Mustafá al Aziz al Shamiri, de 37 años, yemení, es en realidad un miliciano islamista de nivel bajo al que no debían haber tenido en la cárcel de máxima seguridad, y no un correo del grupo terrorista fundado por Osama Bin Laden.
Con barba y vestido con una camiseta blanca, acompañado por dos representantes y un traductor, el preso ha comparecido ante un panel que debe decidir si le pone en libertad. Hasta la fecha no ha sido liberado porque Estados Unidos consideraba que era un preso demasiado peligroso y que representaba una amenaza para su seguridad nacional.
DE ACTIVO TERRORISTA A MILICIANO DE BASE
En el perfil que publicó en su día, el Departamento de Defensa de Estados Unidos sostiene que combatió en Afganistán y que estuvo relacionado con miembros de Al Qaeda. Sin embargo, las autoridades estadounidenses han admitido ahora que creían que tenía un papel más importante que el que realmente ejercía porque le confundieron con otro miliciano con datos de identificación similares.
"Mustafá Abd al Qawi Abd al Aziz al Shamiri (identificado en Guantánamo como YM-434) combatió en varios teatros yihadistas y se asoció con miembros de Al Qaeda en Afganistán", señala el perfil publicado por el Pentágono.
"Previamente se estimó que el preso YM-434 era un facilitador o correo de Al Qaeda, además de un instructor, pero ahora entendemos que estas actividades fueron llevadas a cabo por otros conocidos extremistas con nombres o alias similares a los de YM-434", han afirmado las autoridades de Estados Unidos.
El perfil de este preso de Guantánamo señala que hay algunos datos que vinculan a Al Shamiri con la guerra de Bosnia y Herzegovina en 1995 y que les dijo a los interrogadores que luchó en la guerra civil de Yemen en 1996 y en Afganistán con los talibán de 2000 a 2001, también contra la Alianza del Norte y las fuerzas de Estados Unidos, antes de que fuera capturado cerca de Mazar i Sharif, en el norte del país.
DETENCIÓN INDEFINIDA
Desde su detención, ha permanecido en régimen de detención indefinida al ser considerado demasiado peligroso para ser liberado aunque sin que existan pruebas para llevarle a juicio.
En un comunicado, la representación de Al Shamiri ha dicho que ha cooperado con la justicia y que se ha mostrado entusiasta y dispuesto a declarar en la comparecencia ante las autoridades judiciales". "Desde el comienzo (del proceso), ha mostrado una actitud positiva hacia la vida tras Guantánamo", han señalado. "Tiene un fuerte deseo de recibir una educación para la futura esposa que su familia ya le ha localizado", han afirmado.
"Mustafá demostrará que no sigue siendo una amenaza importante para Estados Unidos. Se está preparando seriamente para su vida después de Guantánamo. Durante su detención, ha ido a clases de arte y de inglés, además de aprender carpintería y cocina. Durante el último banquete, Mustafá tuvo la generosidad de preparar más de 30 platos y dulces para sus compañeros detenidos. Cuando le preguntamos por qué hizo los dulces, dijo que lo hace porque le hace sentir que puede compartir y devolver cosas al resto de la gente", ha indicado el letrado.
Tras su testimonio, las autoridades de Estados Unidos deben decidir ahora si ponen en libertad a Al Shamiri, que ha estado encerrado en Guantánamo como combatiente enemigo sin cargos desde 2002. Es uno de los 107 prisioneros que siguen en el polémico centro de detención, de los cuales 48 ya han recibido autorización para ser liberados.
¿CUÁNDO CIERRA?
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, está decidido a cerrar la prisión antes del final de su mandato, en 2017, según ha repetido en varias ocasiones, pero por ahora se encuentra con la oposición del Congreso.
La prisión fue establecida en 2002 por la administración de George W. Bush. Fue instalada para trasladar a los sospechosos considerados más peligrosos para ser interrogados y juzgados por crímenes de guerra. Desde entonces, las críticas de gobiernos de la región y organismos de derechos humanos se centraron en el periodo de tiempo que los prisioneros permanecen en Guantánamo sin cargos y las técnicas de interrogatorio que se utilizan.