Una conductora ebria choca contra el coche del cardenal Cañizares
El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha resultado herido leve en un accidente de tráfico en la madrugada de este sábado, cuando salía de Valencia en automóvil hacia Ávila para acudir a la profesión de votos de una religiosa carmelita, según ha indicado el Arzobispado en un comunicado.
El purpurado ha sufrido una contractura muscular en su brazo y un corte en la cara, heridas de las que ha sido atendido en el Hospital General de Valencia; se encuentra ya en su domicilio en el Palacio Arzobispal, con el brazo en cabestrillo, por lo que deberá guardar reposo cuatro días.
El accidente se ha producido a las 6.30 horas de la mañana cuando el vehículo del Arzobispado, en el que viajaba el cardenal, ha chocado frontalmente en un cruce de la avenida del Cid con un turismo conducido por una joven que, al parecer, "podría haberse saltado un semáforo en rojo", según las mismas fuentes. La conductora ha dado positivo en el test de alcoholemia. Tras el impacto, el automóvil del Arzobispo ha sido alcanzado por detrás por otro turismo.
El chófer del vehículo del Arzobispado ha resultado también herido leve y se encuentra en observación en el Hospital General. Los conductores de los otros coches "tampoco han sufrido heridas de consideración", han añadido.
El Cardenal tenía previsto, tras la profesión de votos de la religiosa carmelita en Avila, dirigirse hacia Madrid para volar hacia Roma y concelebrar este domingo con el papa Francisco en la misa de canonización de los padres de Santa Teresita de Lisieux, en una celebración en la que participará una niña valenciana en la que se produjo un milagro atribuido a la intercesión del matrimonio francés.
SEMANA POLÉMICA
El cardenal ha sido esta semana foco de atención en los medios de comunicación tras cuestionar en un desayuno informativo si la "invasión" de refugiados en Europa "eran todos trigo limpio" que ha provocado numerosas críticas incluso de la Iglesia católica y que le ha valido ser denunciado ante la Fiscalía.
Cañizares pidió perdón por sus palabras aunque reprochó que sus palabras habían sido tergiversadas y había sido objeto de un linchamiento por parte de los medios de comunicación.