Muere el escritor Günter Grass a los 87 años
El escritor alemán Günter Grass, galardonado con el Premio Nobel de Literatura y el premio Príncipe de Asturias, ambos en 1999, ha muerto a los 87 años, según ha informado la editorial Steidl.
El autor de obras como El tambor de hojalata ha fallecido en una clínica de Lübeck, al norte de Alemania, informa el comunicado de dicha editorial.
Günter Grass gestorbenIm Alter von 87 Jahren ist heute morgen der Literaturnobelpreisträger Günter Grass in einer Lübecker Klinik gestorben.
"A la edad de 87 años, el ganador del Premio Nobel Günter Grass ha muerto esta mañana en un hospital de Lübeck"
Grass, que nació en Ciudad de Dánzig en 1927, fue una figura destacada en la literatura alemana después de la II Guerra Mundial. Comenzó su carrera en el teatro, en 1956 publicó Los malos cocineros, y tres años después escribió su primera novela; El tambor de hojalata (1959) (1959) , que obtuvo un enorme éxito y 20 más tarde fue llevada al cine.
Después escribió otras novelas como El gato y el ratón (1961), Años de perro (1963), El rodaballo (1977), Partos mentales (1980), Mi siglo (1999), A paso de cangrejo (2002) o su autobiografía Pelando la cebolla (2006). Así hasta que en enero de 2014 anunció que ya no escribiría más novelas: "Ahora tengo 86 años. No creo que haga otra novela".
En lo personal, estuvo casado en dos ocasiones y tuvo ocho hijos. Grass tenía una veintena de nietos. Además era doctor honoris causa por las universidades de Kenyon College (Ohio, 1965), Harvard (1976), Mickiewickz (Polonia, 1990), Danzig (1993) y Lübek (2003).
MÁS ALLÁ DE LAS LETRAS
Fuera de lo estrictamente literario, a Grass se le considera una autoridad moral y política en Alemania, por su compromiso constante tanto con el pasado reciente de su país, como por su capacidad de entrar en cualquier controversia, social o de otra índole, sea histórica o de actualidad.
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Respaldó la política del Partido Socialdemócrata (SPD) en tiempos del canciller Willy Brandt y, aunque luego se apartó de la línea de esa formación, por considerarla demasiado centrista, apoyó sucesivas campañas electorales, incluida la que llegó al poder a Gerhard Schröder (1998-2005). En sentido inverso, fue el azote de las filas conservadoras, especialmente en tiempos del canciller Helmut Kohl (1982-1998).
Antes de esto había trabajado como minero y como tallador de lápidas mortuorias, y había estudiado en la Academia de Artes de Düsseldorf y en la Academia de Bellas Artes de Berlín.
LAS JUVENTUDES HITLERIANAS
Muy reconocido como escritor, la reputación de Grass se tambaleó cuando en 2006 admitió que había servido en las Waffen-SS, cuerpo de élite y brazo de combate de las SS, poco antes del final de la II Guerra Mundial.
El escritor hizo esta nueva revelación en una entrevista en el diario alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung en agosto de 2006, donde insistió en el carácter involuntario de su acción: tenía solo 15 años cuando Hitler le llamó a filas. Grass siempre había admitido su relación con las juventudes hitlerianas, aunque siempre había dicho que no conocía la existencia de los campos de exterminio: "Tras la derrota de Alemania, con 17 años, fui prisionero de los americanos, para ser "reeducado". Y ellos me llevaron a visitar el campo de Dachau..."
Las Waffen-SS a las que sirvió Grass estaban bajo la dirección de Heinrich Himmler y fueron creadas como unidad de protección del partido nazi, luego se convirtieron en cuerpo paramilitar de combate y fueron especialmente activas en la perpetración del Holocausto, resume Efe
Ese episodio lo recogería en su biografía Pelando la cebolla (2006), publicada semanas después. "Tenía quince años, es tan solo una breve referencia en este libro. Esperen a leerlro", aseguró a El País en relación al mismo.
Seis años después de esta revelación, todavía fue utilizada en su contra. Cuando a comienzos de abril de 2012 publicó el poema Was gesagt werden muss (Lo que hay que decir), en el que Grass acusaba a Israel de poner en peligro la frágil paz mundial con su potencial atómico, así como de plantearse un ataque a Irán capaz de aniquilar a su población, el gobierno israelí lo declaró "persona non grata", lo acusó de antisemitismo y volvió a recordar aquella confesión.