Marruecos sostiene que los montañeros españoles accidentados cometieron varios errores de cálculo
Los tres montañeros españoles accidentados en un barranco del Atlas marroquí cuando hacían escalada, dos de los cuales fallecieron, cometieron varios errores de cálculo, según han manifestado este miércoles fuentes oficiales marroquíes.
Zubir Bouhout, director del Centro Regional de Turismo de Uarzazate, y único responsable marroquí que hasta ahora se ha pronunciado sobre el accidente, ha lamentado que los tres montañeros no calcularan bien las condiciones meteorológicas de la zona antes de adentrarse en ella.
En esta época del año, el tiempo se complica debido a las variaciones térmicas y la consistencia cambiante del abundante hielo que se encuentra en el Wandrass, considerado además como uno de los cañones más difíciles del país.
Aparte del factor meteorológico, Bouhout ha indicado a EFE también que el grupo de montañeros no contó ni siquiera con los servicios de una agencia de viajes especializada en rutas de senderistas, que elige los circuitos seguros y asume toda la responsabilidad en lo referente a la seguridad de los clientes.
"Si no deseaban pasar por una agencia de viajes -ha dicho Bouhout- al menos podrían haber contratado a un guía especializado de montaña, que aporta varias ventajas en una aventura de este tipo: conoce la zona al detalle, habla la lengua local y sabe cuáles son los senderos y los itinerarios seguros".
DIFICILES DE LOCALIZAR
Ha asegurado también que hubo otro factor que complicó además la localización y ayuda a los escaladores: entraron en Marruecos por Tánger y se dirigieron al cañón sin pernoctar en ningún hotel, lo que dificultó poder encontrar su rastro cuando llegaron las primeras noticias del accidente.
"Finalmente y pese a que ellos habían optado por realizar en solitario su aventura, la población local, la mejor conocedora del terreno del cañón y sus alrededores, fue de gran ayuda en las tareas de rescate", ha destacado, aunque sin precisar de qué modo.
Para Bouhout, los montañeros se inclinaron hacia una "opción que no estuvo bien calculada" en una aventura que según él requería que se tomasen todas las precauciones necesarias porque "se trata de vidas humanas".
Los cadáveres de los dos fallecidos serán repatriados este jueves a España tras practicarse la autopsia en Marrakech, de acuerdo con lo dispuesto por las autoridades marroquíes.
"Expreso mi total solidaridad y compasión con los familiares de los dos montañeros fallecidos y creo que no hay que polemizar sobre esta desgracia", ha afirmado Bouhout a modo de respuesta a las críticas suscitadas en España sobre la falta de medios de rescate de la policía marroquí o sobre la supuesta poca voluntad del gobierno de Rabat de facilitar las tareas.
José Morilla, un compañero de los espeleólogos, aseguró que "Gustavo Virués ha muerto en la montaña, pero a José Antonio Martínez lo han matado entre el Gobierno español y el marroquí" y que si le hubiese pasado lo mismo "al rey de España, a un ministro o al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en cinco minutos se hubiera puesto toda la operación en marcha, pero como era un españolito de a pie no han hecho absolutamente nada".
Sin embargo, según informa El Confidencial, el presidente de la Federación de Espeleología afirma que “culpar a los Gobiernos es un poco drástico”. Desde la federación aseguran que el Gobierno español hizo todo lo posible para tratar de efectuar el rescate a tiempo.