Continúa la polémica. El diputado del PP por Toledo Agustín Conde se ha referido a su comentario en la red social Twitter la pasada semana celebrando el cese de la corresponsal de Televisión Española en Jereusalén, asegurando que le pedirá perdón "si ella reconoce que Hamas es un grupo terrorista".
El pasado 25 de marzo, tras conocerse el relevo de esta periodista como corresponsal en Oriente Medio, Conde publicó en su perfil en Twitter que "por fin" se le había cesado, añadiendo que parecía "una activista de Hamas en contra de Israel".
A preguntas de los medios durante un desayuno informativo organizado por Encanstillalamancha.es, ha asegurado que "la información de esta periodista" no le parecía "ni adecuada ni equilibrada".
"Israel no lo ha hecho todo bien, pero no me ha parecido bien su información. El periodista tiene la posibilidad de opinar, y yo de opinar de la periodista", ha señalado.
Los seguidores de la Unión Sionista, desolados tras conocerse las encuestas a pie de urna que daban una ventaja al Likud sobre su alianza progresista. La imagen fue tomada en su cuartel general, en Tel Aviv.
El primer ministro Benjamín Netanyahu besa a su esposa, Sara, tras conocerse que se mantendría en el poder al ganar las elecciones israelíes.
"Bibi, eres un mago" o "Bibi, el rey" fueron los cánticos con los que los seguidores del Likud recibieron a su líder, Benjamín Netanyahu.
Moshe Kahlon, que tiene la posibilidad según los resultados de estas elecciones de ser el principal socio de Benjamín Netanyahu, feliz en su comparecencia ante sus seguidores en Tel Aviv.
Cansancio y desolación entre los seguidores de Isaac Herzog y Tzipi Livni, derrotados por Netanyahu.
Aún antes de conocer los resultados oficiales, los buenos datos de las encuestas causaron una enorme satisfacción, evidente, a Netanyahu.
Tzipi Livni e Isaac Herzog, aliados en Unión Sionista, cuando aún las encuestas auguraban un empate técnico con el Likud. Luego llegó la derrota y ninguno de los dos líderes ha vuelto a comparecer.
Tzipi Livni e Isaac Herzog, aliados en Unión Sionista, cuando aún las encuestas auguraban un empate técnico con el Likud. Luego llegó la derrota y ninguno de los dos líderes ha vuelto a comparecer.
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Panfletos de la campaña de Benjamín Netanyahu entre papeletas del Likud, después de la fiesta de fin de elecciones en el cuartel general del partido conservador, en Tel Aviv.
Los seguidores de la Unión Sionista, desolados tras conocerse las encuestas a pie de urna que daban una ventaja al Likud sobre su alianza progresista. La imagen fue tomada en su cuartel general, en Tel Aviv.
Moshe Kahlon, que tiene la posibilidad según los resultados de estas elecciones de ser el principal socio de Benjamín Netanyahu, feliz en su comparecencia ante sus seguidores en Tel Aviv.
Tzipi Livni e Isaac Herzog, aliados en Unión Sionista, cuando aún las encuestas auguraban un empate técnico con el Likud. Luego llegó la derrota y ninguno de los dos líderes ha vuelto a comparecer.