9 cosas que diferencian a chicos y chicas en los estudios
La brecha educativa entre chicos y chicas se mantiene aún en el mundo más desarrollado. Es la principal conclusión del último informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que ha constatado que aún existen notables diferencias en la evolución de los y adolescentes. Por primera vez, este organismo pone el foco en el rendimiento de los chavales de 15 años por sexo, con el Informe PISA 2012 como referente y bajo el título "El abc de la desigualdad de género en educación".
Las chicas alcanzan mejores resultados como norma general pero, a la vez, muestran una tremenda inseguridad a la hora de abordar materias científicas, lo que lastra sus resultados. Estas son las principales conclusiones del estudio:
Los chicos que no alcanzan el mínimo requerido de conocimientos en las tres materias examinadas (Lectura, Matemáticas y Ciencias) es del 14%, frente al 9% de las chicas. La razón principal que aducen los expertos es que ellas encuentran un placer mucho mayor que ellos en la lectura no forzosa, especialmente de novelas, textos largos que requieren de más esfuerzo y concentración y que generan más competencia lectora, "que es el fundamento sobre el que se levanta todo el conocimiento". El 70% de las chicas leen por gusto frente a menos del 50% de los chicos.
No sólo es clave la lectura, sino el empeño: las adolescentes dedican 1,3 horas diarias más a hacer los deberes y a estudiar que sus compañeros, un tiempo que ellos destinan más al ocio, videojuegos sobre todo.
Los expertos sostienen que, además, las chicas demuestran un mayor compromiso con su obligación de estudiar y con su centro. Es casi nulo el porcentaje de las que querrían pasar del instituto, mientras que el 8% de los chavales dicen que ir a clase es una pérdida de tiempo. Esto, además, lleva a distintas actitudes en el aula.
Las diferencias anteriores llevan a que un 30% de las niñas de 15 años repitan curso, frente al 35% de chicos.
En Lectura las chicas obtienen mejores resultados, 502.5 puntos, frente a los 473.8 de los chicos. En Ciencias, los datos son similares entre ambos sexos: las chicas obtienen 497.7 puntos y los chicos 500. Pero en Matemáticas, las diferencias se acentúan a favor de los chicos: ellas obtienen 476 puntos frente a los 492.4 puntos de los chicos.
Pese al mayor éxito académico de las niñas, en materias científicas y matemáticas ellas llegan a estar hasta 19 puntos por debajo de los chicos. La razón esencial es su falta de confianza al abordar estas temáticas y hacer desarrollos mentales complejos. Se sienten inseguras, indican los expertos, y eso impide que lleguen a dar todo su potencial. Porque si algo está claro, matizan, es que no hay diferencia biológica alguna en la mente de un niño y una niña para llegar a lograr los mismos resultados. Las chicas reconocen además un especial sentimiento de ansiedad hacia las matemáticas.
(Sigue leyendo después de este gráfico)
Padres y profesores marcan la diferencia. La OCDE dice que todavía unos y otros tienen nociones estereotipadas de las carreras en las que mujeres y hombres tienen éxito y suelen apoyar más a sus hijos que a sus hijas a la hora de que opten por una carrera cientÍfica o una ingeniería. Por eso incide en la necesidad de que progenitores y educadores "motiven por igual" a unos y a otras.
En 2012, por ejemplo, un 14% de las jóvenes frente al 39% de los hombres optó por una carrera tipo ingeniería, en la universidad o en módulos superiores de FP. Esto tiene consecuencias también en otros aspectos, dice el estudio, ya que las carreras científicas tienen mayores salidas laborales y mejores sueldos.
Las chicas piensan además que están peor preparadas para trabajar. Lo afirma un 10% más que los chicos, según el análisis. Ellos tienen una confianza "alta" en su formación y capacidades y, con la madurez, terminan por llegar a una comprensión lectora idéntica a la de sus compañeras. A igual formación y menor inseguridad, más posibilidades, además, de lograr puestos directivos en el futuro.