El juez investiga el supuesto patrimonio oculto de Matas en EEUU
El juez instructor del caso Palma Arena, José Castro, ha levantado este lunes el secreto que pesaba sobre unas investigaciones relativas al patrimonio ilícito que supuestamente tiene oculto en Estados Unidos el expresidente del Govern balear Jaume Matas.
Matas fijó allí su residencia tras perder las elecciones autonómicas y municipales de 2007, según han informado fuentes jurídicas a Europa Press.
El magistrado da impulso así a unas pesquisas que se iniciaron hace más de cuatro años y que se han mantenido en sigilo hasta ahora.
Las sospechas afloraron, entre otros motivos, cuando el exministro tuvo que hacer frente a la fianza de tres millones de euros que el juez le impuso en marzo de 2010, y cuyo pago le permitió eludir entonces su ingreso en prisión preventiva.
Sin embargo, Matas no pudo evitar entrar en la cárcel el pasado mes de julio para cumplir la condena de 9 meses por tráfico de influencias a la que fue condenado en el marco del caso Palma Arena.
Matas, que lideró el PP balear desde 1996 a 2007, encabeza la larga lista de altos cargos de Baleares encarcelados por delitos de corrupción por delante de Maria Antònia Munar, expresidenta del Consell de Mallorca y del Parlament balear, y cuyo partido, la extinta Unió Mallorquina, se disolvió inmerso en numerosos procesos judiciales que afectaron a la práctica totalidad de sus dirigentes.
¿DE DÓNDE PROCEDE EL DINERO?
Las actuaciones acerca de este patrimonio de supuesto origen irregular en EEUU han sido unidas a la pieza principal del caso Palma Arena, que estalló en agosto de 2009 y del que se desgajaron hasta un total de 27 piezas separadas. Las pesquisas relacionan el sobrecoste del Palma Arena -que acabó costando a las arcas públicas 110 millones de euros, el doble de la cantidad inicialmente presupuestada- con los elevados gastos en que incurrieron Matas y su mujer durante la época en la que por segunda vez fue presidente balear (2003-2007).
Sin embargo, durante su primera declaración ante el juez José Castro, en marzo de 2010, el expresidente justificó sus dispendios en el cobro de ingresos no declarados por el alquiler de una vivienda de Palma.
Los fiscales anticorrupción Pedro Horrach y Juan Carrau pusieron la lupa sobre el exmandatario en 2009 tras detectar posibles irregularidades en la compra de la vivienda que posee en la céntrica calle palmesana de Sant Feliu, conocida como 'palacete', por la que el exdirigente 'popular' pagó unos 980.000 euros pese a que el inmueble, de más de 700 metros cuadrados y de estilo manierista, estaba tasado en 2,4 millones.