La Inspección de Trabajo cierra el polémico crematorio de la Complutense
La Inspección de Trabajo ha decretado este martes la suspensión de actividad en el horno crematorio del Departamento de Anatomía y Embriología Humana II de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid, al registrarse deficiencias, según han indicado fuentes sindicales y de la propia universidad.
Esta decisión, tomada después de la información publicada este lunes por el diario El Mundo, según la cual en las instalaciones de este departamento se hacinan más de 250 cadáveres sin control ni higiene, supone la paralización de todos los trabajos del personal encargado de la manipulación de los cadáveres, de cara a preservar la seguridad y salud de empleados.
Además, la Inspección de Trabajo añade que el horno crematorio y la zona de acumulación de cuerpos donados debe ajustarse a las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo. Esta suspensión se ha producido después de la visita de oficio de técnicos de la Inspección de Trabajo, tras constatarse la acumulación de cadáveres en esta zona, que el rector del centro, José Carrillo, ha cifrado en 100 cuerpos.
INVESTIGACIÓN INTERNA
La Universidad ha abierto una investigación interna para depurar responsabilidades, aunque este martes aseguraba a través de un comunicado que la noticia de El Mundohablaba de "un falso museo de los horrores en la Facultad de Medicina", y sostenía que las fotografías publicadas se obtuvieron "de forma subrepticia en una cámara de acceso restringido", además de que correspondían "a la fase final", cuando los restos cadavéricos "formolizados y momificados han cumplido su etapa de utilización" y pasan a la "fase previa a la incineración o el enterramiento".
Fuentes conocedoras de la resolución han explicado que la suspensión de actividad no tiene plazo ni fecha fija, pero está sujeta también al desarrollo de una reunión que tendrá lugar este jueves entre representantes del servicio de prevención de riesgos laborales de la universidad, delegados sindicales e Inspección de Trabajo.
En ese encuentro, según las mismas fuentes, se establecerá si se levanta la suspensión de actividad o se mantiene. En caso de que se mantenga, las fuentes consultadas de la UCM entienden que la medida a adoptar será acordar un protocolo con una empresa funeraria para el traslado e incineración de los cuerpos, al igual que sucede en el departamento de Anatomía I.
LOS ESTUDIANTES DENUNCIAN SENSACIONALISMO
La Asociación de Estudiantes de Medicina para la Cooperación Internacional de la Universidad también ha querido manifestarse respecto al artículo del diario, y ha señalado en un comunicado que le ha sorprendido el "modo sensacionalista" en que ha sido publicado.
"Es cierto que los cadáveres siguen teniendo derechos hasta en sus últimos momentos, derechos que hay que respetar, sin embargo creemos que es una total falta de respeto publicarlo de modo que se ridiculiza a la Universidad y se falta al respeto a las personas ya fallecidas insinuando que no son más que carne podrida", exponen los estudiantes.
"También nos gustaría destacar que en nuestras prácticas de Anatomía se resalta el trato a los cadáveres con sumo respeto, y los alumnos están mentalizados de ello", continúa el comunicado, que reconoce también que "el hacinamiento de cuerpos no es lo propio" que la situación "causa vergüenza" y que "deberían tomarse medidas", pero, sin que para ello sea necesario "ridiculizar la práctica de la donación altruista de cuerpos a la ciencia o de la enseñanza práctica de anatomía".
CCOO PIDE UNA "SOLUCIÓN PERMANENTE"
Por su parte, el sindicato CCOO ha aseverado que la situación generada en este departamento requiere una "solución permanente que vaya más allá de las medidas puntualmente adoptadas por la Universidad para solventar la actual situación".
"El proceder a la retirada de los cuerpos humanos de manera acelerada no asegura en ningún caso que la situación no vuelva a reproducirse", expone el sindicato, que también pide que se realice "a la mayor brevedad posible" exámenes de salud a los trabajadores afectados.