Siria, tierra hostil para los periodistas

Siria, tierra hostil para los periodistas

GTRES

Siria es el escenario de un auténtico drama humano. Los periodistas de todo el mundo quieren contar el sufrimiento de los ciudadanos de este país, pero se ha convertido casi en una misión imposible. La prensa no está bien vista por ninguno de los bandos enfrentados, no es bienvenida.

El caso de los periodistas españoles Javier Espinosa (corresponsal de El Mundo) y Ricardo García Vilanova (fotógrafo y camarógrafo freelance), secuestrados el pasado 16 de septiembre, ha sido el último en conocerse. Según los datos de Reporteros Sin Fronteras (RSF), 22 informadores del propio país -periodistas, internautas y personas relacionadas con los medios- están secuestrados, detenidos o desaparecidos a manos de grupos armados en el norte del país.

Pero, además, hay otros 18 periodistas extranjeros en la misma situación en Siria (de países árabes limítrofes y de Suecia, España, Francia y Estados Unidos). En el caso de nuestro país, son tres los periodistas secuestrados (Espinosa, García Vilanova y Marc Marginedas).

TRES DRAMAS ESPAÑOLES

Espinosa: un experto en Oriente Medio

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De 49 años de edad, es todo un experto en Oriente Medio y refleja la situación de esta zona en el periódico El Mundo. Desde 1994 está ligado a este diario para el que ha cubierto acontecimiento como el fin del apartheid en Sudáfrica o las masacres en Ruada. También ha sido corresponsal en Marruecos, América Latina e Irak.

Su pareja, la también periodista Mónica García Prieto, ha relatado en un vídeo en el que pide su liberación el compromiso de Espinosa con la información: "cuando le pedí que se marchase antes de la caída de Homs, me respondió que tenía la obligación de contarlo".

García Vilanova: los ojos del conflicto

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Desde hace quince años, se dedica como fotógrafo y cámara freelance a narrar los que sucede en los conflictos internacionales. Sus imágenes han ilustrado situaciones límite en Afganistán, Haití, Libia y Siria.

Según Reporteros Sin Fronteras, durante estos meses se ha centrado en retratar con especial dedicación a las víctimas civiles y a los niños. Entre otros medios, ha trabajado para Al Jazeera, France Press, Channel 4, Reuters, TV3 y Cuatro.

Marginedas: un veterano corresponsal

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Más de tres meses lleva secuestrado por los yihadistas el corresponsal de El Periódico en Siria. El periodista fue retenido el 4 de septiembre por un grupo de la insurgencia cuando viajaba en coche junto con el chófer que lo acompañaba en los alrededores de la ciudad de Hama (oeste de Siria).

El corresponsal se había introducido en el país tres días antes a través de la frontera con Turquía. Era su tercera temporada en el país de Oriente Medio y, en esta ocasión, tenía la intención de informar sobre el inminente ataque internacional anunciado por Estados Unidos, que finalmente no se produjo.

EL PAÍS MÁS PELIGROSO DEL MUNDO PARA UN PERIODISTA

¿Cómo es para un periodista cubrir el conflicto sirio? Reporteros Sin Fronteras publicó a principios del mes de noviembre un informe sobre ello y es bastante ilustrativo: “Siria es actualmente el país más peligroso del mundo para un periodista”.

Según este documento, para los corresponsales de guerra más veteranos esta cobertura “es como una especie de lotería macabra o ruleta rusa”. El informe recoge testimonios de algunos de ellos escalofriantes. “Ahora se necesita mucha suerte para salir vivo de allí o que no te secuestren”, dice uno de los desplazados.

Esto se debe, entre otros factores, a que es un “terreno tan complicado” y “los protagonistas están tan enredados” que hace que “hasta el periodista más experimentado” pierde “sus puntos de referencia”.

La presidenta de Reporteros Sin Fronteras en España, Malén Aznárez, afirma en El Huffington Post que este país es "un auténtico agujero negro", donde informar "se ha convertido en algo imposible, y en el que periodistas, internautas y periodistas ciudadanos que pretenden hacerlo con honestidad, y al margen de la propaganda, corren altísimo riesgo de ser asesinados y, en los últimos meses, secuestrados".

"MÁS DIFÍCIL QUE EN OTRAS GUERRAS"

“Aquí resulta más difícil que en otras guerras saber quién controla cada barrio, descifrar las alianzas y, a veces, incluso saber quién es quién. Es un país en donde se ha cultivado durante décadas el arte del disimulo y la manipulación política bajo el mandato del clan Asad”, especifica además el informe.

Esta situación tan dramática se debe también a que no solo son perseguidos los periodistas por parte del ejército oficial, sino que también están en el punto de mira de grupos de la oposición armados en las áreas liberadas del norte.

Muchos periodistas han decidido, según recoge el informe de Reporteros, informar desde Estambul, en Turquía. Pero todavía algunos quieren estar sobre el propio terreno y contar lo que está sucediendo a todo el mundo, aunque les cueste la vida. El viejo oficio del periodismo.