Ecologistas piden al Gobierno que no use el medio ambiente para justificar el conflicto con Gibraltar
Los activistas Ecologistas en Acción han pedido al gobierno de Mariano Rajoy que "no use el medio ambiente" como justificación al conflicto que se abrió hace una semana en Gibraltar.
En una nota, subrayan que la actividad del 'bunkering' "debe ser prohibida de manera definitiva ya que es un peligro inaceptable el suministrar combustible libre de impuestos desde buques nodrizas anclados en la Bahía de Algeciras (Cádiz)".
Para los ecologistas, esta actividad "saca a relucir, una vez más, los intereses del ministro de Medio Ambiente, Arias Cañete, en el citado negocio, pues durante un tiempo fue presidente de Petrolífera Ducar SL", firma dedicada al almacenamiento y suministro de combustibles a buques, con base en Ceuta.
Ante la polémica creada en torno al lanzamiento de bloques de hormigón en las aguas que rodean el peñón de Gibraltar, los activistas recuerdan que "se trata de una práctica habitual en el litoral peninsular" y que se ha llevado a cabo en distintas zonas de Andalucía para crear arrecifes artificiales que regeneren el fondo marino y los caladeros locales, además de impedir la pesca de arrastre "que es agresiva para la conservación del fondo marino".
"Los bloques no son los detonantes reales del conflicto, aunque la forma y el sitio escogidos por las autoridades de Gibraltar no hayan sido negociados", remachan.
Por último, añaden que el LIC (Lugar de Interés Comunitario) que protege las aguas de la Bahía de Algeciras "tiene que garantizar que se practica una pesca sostenible", toda vez que Ecologistas en Acción entiende que "el medio ambiente debe defenderse al margen de banderas y rencillas políticas".
NO ES EXCESIVAMENTE PERJUDICIAL
Greenpeace también ha defendido esta semana que "la colocación de bloques de hormigón en el fondo marino a modo de arrecife artificial no es generalmente algo excesivamente perjudicial. De hecho, es un material común en el diseño de este tipo de estructuras".
En un blog publicado en El Huffington Post, Elvira Jiménez, de la Campaña de océanos de Greenpeace España argumentaba que "en muchas ocasiones, el hormigón cuenta con huecos y ranuras para que en ellos busquen refugio peces o se fijen a la superficie pequeños invertebrados y así aumentar la biodiversidad de la zona".