Mario Draghi trata de tranquilizar a una Alemania recelosa del rescate de España
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, ha defendido en el Parlamento alemán el nuevo programa de compra de deuda anunciado por la institución y que probablemente se utilizará para rescatar a España de la especulación.
Draghi trató de calmar los temores de los diputados alemanes que creen que será un riesgo para la independencia de la institución o los contribuyentes de la eurozona, además de constituir una "financiación encubierta" de gobiernos como el español que va a provocar un aumento de la inflación. Según Draghi, nada de eso es cierto.
En una comparecencia ante parlamentarios alemanes, Draghi incidió en que este tipo de intervenciones están diseñadas para enviar una "clara señal" a los inversores de que sus temores sobre la zona euro son "infundados", y recalcó que esta medida tiene como condición la petición de ayuda al fondo europeo de rescate.
NO SERÁ DINERO A FONDO PERDIDO
El presidente del BCE subrayó que antes de anunciar el programa OMT se analizaron "muy cuidadosamente" los posibles riesgos y se diseñaron las formas de minimizarlos, aunque reconoció que es consciente de que existen en Alemania personas que aún tienen dudas sobre el impacto de la política del BCE.
Ante estas preocupaciones, Draghi garantizó a los parlamentarios alemanes que las OMT no supondrán una "financiación encubierta de los gobiernos", ya que solo tendrán lugar en los mercados secundarios, por lo que se adquirirá la deuda a los inversores, no a los gobiernos. "Esto es totalmente compatible con la prohibición del Tratado de financiación monetaria", agregó.
Asimismo, también defendió que no compromete la independencia del BCE, ya que será la institución quien decida si interviene en función de sus análisis de la transmisión de la política monetaria y con el objetivo de salvaguardar la estabilidad de precios.
HABRÁ CONDICIONALIDAD
"El hecho de que los gobiernos tendrán que cumplir con la condicionalidad establecida protegerá realmente nuestra independencia. El BCE no será forzado a dar un paso si se produce una falta de implementación política", aseguró.
En tercer lugar, Draghi incidió en que el programa no creará "riesgos excesivos para los contribuyentes de la eurozona", ya que se evitarán asegurándose de que los países no aplican políticas erróneas. Así, añadió que la posibilidad de suspender la ayuda si no es realizada una valoración positiva de la aplicación de las condiciones garantizará que el BCE solo interviene en países donde sus economías y sus finanzas están "en la senda correcta".
Por último, el presidente del BCE remarcó que las OMTs no se traducirán en más inflación, dado que se han diseñado para que sus efectos sobre las condiciones monetarias sean "neutrales". De hecho, subrayó que no hay señales de que el anuncio del programa haya afectado a las expectativas de inflación.