Juicio a las Pussy Riot: ¿7 años de cárcel por pedirle así a la virgen que eche a Putin? (FOTOS, VÍDEO)
Javier Krahe se libró de la cárcel en España por cocinar un Cristo, pero en Rusia las integrantes del grupo de punk Pussy Riot podrían pasar 7 años en prisión por una performance en la catedral Cristo Salvador de Moscú en la que pidieron a la Virgen que le quite el poder a Putin.
El tribunal moscovita Jamóvnicheski comienza este lunes la vista del juicio contra tres integrantes del grupo femenino. Nadezhda Kolokolniva (22 años), Yekaterina Samutsevich (29) y María Aliojina (24), están acusadas de vandalismo, según el artículo 213 del código penal, por atentar contra los valores tradicionales de la Iglesia Ortodoxa Rusa. Durante el juicio, estas integrantes del grupo, arrestadas hace cinco meses, han lamentado si han podido ofender a los creyentes y han pedido perdón por su "error moral", según Europa Press.
"No hemos pronunciado palabras insultantes contra la fe de los creyentes, la Iglesia o Dios", han asegurado las arrestadas en una declaración leída por su abogada, Violetta Volkova, durante la audiencia retransmitida en directo a través de internet. Su intención era reivindicar "una mejora de la vida política" del país. De momento, los jueces han ordenado que sigan en prisión hasta enero de 2013, según AFP.
Su acto era una protesta por el apoyo de los jefes de la Iglesia Ortodoxa rusa al entonces primer ministro Vladimir Putin en vísperas de las elecciones del 4 de marzo, que le volvieron a convertir en presidente (por tercera vez).
"MADRE DE DIOS, ECHA A PUTIN"
Fue el pasado 21 de febrero cuando varias integrantes de Pussy Riot irrumpieron encapuchadas en una zona restringida del altar del principal templo ortodoxo ruso, desde donde se ofician las homilías. Unas imágenes que han visto cientos de miles de personas en YouTube. Se desprendieron de varias de sus prendas de vestir y comenzaron a tocar la guitarra eléctrica, a cantar y a bailar en ropa interior. "Madre de Dios, echa a Putin", decía la canción. Sólo tres de ellas fueron detenidas.
Según los fiscales, el grupo actuó "de una manera extremadamente vulgar para un lugar así" y la canción que interpretaron, titulada "Holy shit", es "insultante y sacrílega para los ortodoxos".
La Iglesia rusa reaccionó indignada ante la profanación del templo y pidió un severo castigo contra las mujeres, mientras las cancillerías occidentales han pedido su inmediata liberación. A la campaña internacional por la libertad de las tres roqueras, en prisión preventiva desde hace varios meses, se han sumado figuras del mundo musical como Sting. "Es horrible que las componentes de "Pussy Riot" puedan ser condenadas a una pena de siete años de cárcel", aseguró el cantante británico en un mensaje divulgado por Amnistía Internacional (AI) y que fue recogido por las agencias rusas.
Sting aseguró que "disentir es un derecho natural e inalienable en cualquier democracia y los políticos deben asumir con tolerancia este hecho". El grupo estadounidense Red Hot Chili Peppers también ha manifestado su apoyo a Pussy Riot los multitudinarios conciertos que recientemente ofreció en Moscú y San Petersburgo, en los que su cantante, Anthony Kiedis, llevaba puesta en su actuación una camiseta con el nombre del grupo ruso.
Los demás miembros de la banda -13 en total, todos anónimos- no llegaron a ser detenidos. Tres de sus integrantes afirmaron en una entrevista la semana pasada que Putin tiene "miedo" del grupo.
En una entrevista concedida al diario británico 'The Times' publicada este lunes, el jefe del Gobierno ruso ha señalado que habrá que esperar con "calma" hasta que se emita un veredicto. "Desde luego, hay distintas posturas. En algunos países, la responsabilidad por acciones de este tipo sería mucho más estricta y, en algunas condiciones políticas, acciones de este tipo en una iglesia, independientemente de la confesión, podrían tener consecuencias muy graves para los responsables", ha declarado, según recoge Europa Press.