A esa generación que llevó chaquetas de pana
Como quien se rebela contra un padre o una madre que envejece, hace algunos años que parte de mi generación reaccionó ante ciertas políticas y contra la ciega lealtad a unas siglas que ya nos parecían un chiste. No obstante, crecimos con los valores que ellos (nuestros padres) nos grabaron a fuego: igualdad, justicia, libertad, lucha social, etc.
Como quien se rebela contra un padre o una madre que envejece, hace algunos años que parte de mi generación reaccionó ante ciertas políticas y contra la ciega lealtad a unas siglas que ya nos parecían un chiste. No obstante, crecimos con los valores que ellos (nuestros padres) nos grabaron a fuego: igualdad, justicia, libertad, lucha social, etc.
Pero los tiempos cambian y los partidos políticos quedan obsoletos, se transforman, desaparecen o surgen otros nuevos. Y a pesar de que llevamos tiempo discutiendo sobre política con los que llevaron las chaquetas de pana y corrieron delante de los grises, no puedo evitar que me salpique parte de la nostalgia y la tristeza que muchos de nuestros viejos sienten estos días.
Sin embargo, lo relevante no son los partidos, lo realmente importante es el legado que esos padres y madres socialistas nos dejaron: sus valores.
Y Yastá.
A mi padre.
Esta viñeta y el texto fueron publicados originalmente en la página de la autora