Una sexóloga enumera las ventajas de dormir separado de la pareja
No está bien visto, pero en ocasiones es una gran solución.
Socialmente está establecido que las parejas compartan la misma cama durante toda la noche, pero en ocasiones aparecen algunas incomodidades que pueden afectar al descanso. Puede ocurrir que una de las dos personas ronque, que se mueva demasiado, que destape al otro, que hable en sueños... o cualquier otra acción que pueda causar molestias puntuales —o, peor, habituales— en la otra.
"La función de dormir juntos es pasar un poco de tiempo solos, ir juntos a acostarse", ha explicado la psicóloga, terapeuta familiar y de pareja y sexóloga Laura Morán a El Correo. Como indica, en muchas ocasiones es el único momento del día para estar juntos y tranquilos.
Ese momento de conexión es muy valioso, pero no hay que perder de vista que la falta de descanso también puede hacer mella en la pareja. Si esto último ocurre, Morán invita a las parejas que acuden a su consulta a "abrir otro rato solo para ellos en algún otro momento del día".
A quien le preocupe que esto pueda dañar la intimidad, en El Correo recuerdan que "la separación nocturna puede incluso resucitar el interés sexual por la pareja".
Citan además una encuesta de SleepFoundation.org en la que se "constató que más de la mitad de los adultos que habían empezado a dormir separados admitían descansar mejor". Nada más y nada menos que hasta 37 minutos más que cuando dormían juntos.