Un periodista de 'The Times' da una tremenda réplica a Ayuso tras su última idea
Es demoledor.
Chris Haslam, redactor jefe de viajes de The Times, ha dado una demoledora respuesta a Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, tras su idea de que los restaurantes de la ciudad adapten sus horarios a los de los turistas.
El periodista titula su artículo de una forma categórica: "No, Madrid no debería cambiar la hora de la cena sólo para complacernos a los británicos".
"Si conoces Madrid aunque sea un poco, entenderás lo que se siente ser uno de esos británicos que esconden su vergüenza detrás de un menú multilingüe porque son los únicos clientes que piden la cena a las 20.30", dice el autor.
"También conocerás los sentimientos de estupidez y decepción que se sienten cuando uno se da por vencido en la tentación de pintar la ciudad de rojo en la Calle de la Cava Baja para volver caminando a su hotel a medianoche, solo para encontrarse con que toda la ciudad viene en dirección contraria para que comience la fiesta", prosigue.
"Pero la tristeza es un regalo, porque cuando uno elige el momento adecuado la noche siguiente el vino sabe mucho más dulce", subraya el periodista, que señala que le resulta "difícil expresar la magnitud" de su "consternación ante la ridícula sugerencia" de Ayuso a los restaurantes.
"Primero de todo, Isabel, hay una distancia mucho más corta de lo que piensas entre atender —literalmente— las necesidades de los obtusos y servir kétchup y una guarnición de patatas fritas delgadas con pulpo y morcilla", dice antes de añadir algo más: "Empezar el año como capital europea de la cultura gastronómica con un acto de capitulación cultural gastronómica no da una buena imagen".
"En tercer lugar, al acomodar a aquellos incapaces de adaptarse se está creando una sociedad segregada", continúa antes de se recordar que la propuesta de Ayuso "ignora una de las reglas más antiguas del turismo": "Cuando estés en Roma, haz lo que hacen los romanos".
Por eso, acaba pidiéndole a Ayuso que "deje de intentar arreglar lo que no está roto" y permita "que los dueños de los aproximadamente 26.000 restaurantes y bares de Madrid se ocupen de sus propios asuntos".
Todo ello después de que Ayuso señalase: "Del mismo modo que nos pasa a los españoles, que muchas veces, cuando salimos fuera, a poco que nos descuidamos, no comemos o no cenamos [porque todo ha cerrado ya], pues al revés también. Entendemos que nos tenemos que adaptar a quienes nos visitan, a quienes nos honran con su visita, y confían en nosotros".