Inés Rodríguez, la joven con parálisis cerebral que dio una lección a los que la llaman "campeona"
La joven arrasó con su reacción a las personas que se dirigen a ella de esta forma.
“A la próxima persona que me llame campeona, la apuñalo. Yo tengo discapacidad y es más habitual de lo que tú te imaginas el ir por la calle tranquilamente o en redes sociales y que venga alguien y me diga ‘eres una campeona, tú puedes con todo, eres un ejemplo a seguir, a tope contigo’”.
Así empezó Inés Rodríguez, una joven tinerfeña con parálisis cerebral el que es uno de los vídeos más impactantes de este 2024. La joven decidió compartir esta reflexión en su perfil de TikTok (@inusu_al), donde tiene más de 140.000 seguidores, y rápidamente se hizo viral sumando ya más de 4 millones de reproducciones.
Rodríguez, en el vídeo, reconocía que es consciente que la gente no lo hace con mala intención. “Soy una persona que puede llegar a comprender que la vida es una mierda y si ves a alguien a punto de caerse al suelo pero que se repone te puede dar energía para seguir con lo tuyo, pero yo sólo quiero ser una persona funcional y vivir mi vida, entonces que me llames campeona me molesta”, afirmaba esta logopeda de 25 años, que actualmente trabaja en Madrid.
Además, seguía en el vídeo contando que ella da las gracias cuando la gente le dice cosas de este estilo porque le consume “menos energía” y remataba confesando que está “harta” de estas expresiones.
“Y no sé si hablo en nombre de la comunidad de personas con discapacidad, que creo que sí, pero no estoy segura. Igual a alguien le encanta que le feliciten por existir, pero yo no soy esa persona entonces, por favor, parad”, sentenciaba.
“Estoy muy contenta del alcance que está teniendo”
Rodríguez, que padece desde nacimiento hipoxia perinatal, ya que no respiró en el momento del parto aunque le fue diagnosticada a los dos años, confiesa estar contenta por la repercusión que ha tenido su vídeo, ya que ha conseguido llegar a muchísima gente que de otra forma no habría podido.
“Estoy muy contenta”, reitera una y otra vez. A pesar del éxito mayúsculo que ha tenido hasta el punto de que le salgan multitud de oportunidades de colaboración con marcas, ella no lo publicó con el objetivo de hacerse famosa. Tampoco esperaba tener un alcance como el que ha tenido. “Llevo haciendo el imbécil bastante tiempo en internet y fue un poco sorpresa”, sentencia.
Según cuenta, a ella acostumbran a llamarla varias veces al mes con adjetivos como el de “campeona”, algo que ha cambiado desde que colgó el vídeo. Ahora, en cambio, si se lo dicen es en tono de humor y de forma irónica: “Se ha dado la vuelta a la tortilla y me lo dicen de broma, como si fuera un meme. Me parece bien y me hace gracia, estoy educando y es muy bueno conseguir esto”.
Rodríguez, tal y como dice en el vídeo, reconoce que aunque no es la portavoz del colectivo, sí que hay muchas personas que piensan como ella. Por ello, ha recibido multitud de llamadas y mensajes tanto por parte de personas con discapacidad como de familiares de estos.
"Estoy haciendo algo útil y me alegro. No soy la portavoz de nadie, yo hago mis cosas y reivindico mis cosas. Hay gente del colectivo que igual les gusta, pues adelante, pero a mí no y entonces lo digo. Tengo mi opinión y no lo voy a dejar de decir", insiste la logopeda, que es consciente que la gente no se lo dice con mala intención. "Por eso no me enfado", confiesa.
"Queda mucho por hacer"
Rodríguez no se lo piensa lo más mínimo a la hora de responder sobre si está preparada la sociedad para integrar a personas con discapacidad. Su conclusión es clara: no, no está preparada y sigue quedando mucho camino por recorrer.
"La sociedad no está preparada para incluir a todo el mundo como se merece, como por ejemplo, en temas de inserción laboral o de barreras arquitectónicas. Sé que es muy difícil porque cada persona es un mundo, pero queda mucho por hacer", afirma.
Explica que "una de las cosas más sencillas de arreglar" es solucionar el problema de las barreras físicas como los escalones y esto es algo que todavía no está conseguido. "Hay que empezar por ahí para luego seguir progresando", indica.
Para contarlo, ella comenta cómo es su día a día en Madrid: "Cada vez que voy al metro pienso que a mis amigos en sillas de rueda no los podría meter. No hay ascensor en las bocas de muchas estaciones".
"Es verdad que se construyó hace muchos años, cuando las personas con discapacidad no estábamos ni en el mapa y eso hay que entenderlo, pero ahora mismo que estamos más avanzados habría que buscar alguna alternativa. Seguro que hay gente con estudios que sabe cómo facilitar el acceso a las personas con movilidad reducida", añade.
Además, también destaca que cafeterías, bares y restaurantes estén eliminando el uso de pajitas: "Me preocupa el planeta, por supuesto, pero esto es un problema para las personas que no podemos beber del vaso normal y necesitamos una adaptación. Yo llevo una de metal a todas partes, pero si la pierdo y tengo que tomar algo fuera es un problema".
Por ello, Rodríguez confía en que su vídeo, su cuenta y su contenido sean un pasito más en la concienciación y en los avances de integración para que personas que se encuentran en su misma situación puedan desarrollar una vida normal.