Hablemos de marketing político. Bueno no, hablemos de envoltorio, de estrategia del parecer. Pongamos que hablo de Madrid. Oye, ¿qué raro querer marcar perfil propio cuando se acaba de conformar un gobierno nacional no? Estoy hablando de la posición de confrontación infinita de Ayuso, como sabéis, presidenta de una Comunidad Autónoma, con el Gobierno central con el fin evidente de elevarse y equipararse al presidente del Gobierno.