El singular avión ultrarrápido que alcanzará el objetivo jamás logrado en la aviación
Podría romper una prohibición vigente desde la década de los 70.
Desde la década de los 70 los vuelos comerciales supersónicos sobre las ciudades están prohibidos debido al gran ruido que generan al sobrepasar la barrera del sonido. Sin embargo, esa restricción podría quedar derogada pronto gracias al nuevo horizonte que puede abrir el avión X-59.
La NASA presentó a principios de año su avión supersónico silencioso X-59 Questst. El acto tuvo lugar en las instalaciones de Palmdale, California (EEUU), pertenecientes a la multinacional aeronáutica Lockheed Martin, contratista principal del proyecto.
El objetivo es conseguir lo jamás logrado en la aviación: volar a una velocidad supersónica haciendo un ruido prácticamente imperceptible. El distintivo diseño afilado y con ala en delta del avión debería ser decisivo para poder reducir el tradicional estallido sónico a un golpe sónico silencioso.
Para alcanzar esa meta, la NASA planea realizar vuelos con el X-59 a lo largo de este año 2024 sobre áreas pobladas. El propósito es recopilar datos sobre cómo percibe la gente el sonido que produce.
Esos datos se proporcionarán a los reguladores estadounidenses e internacionales con la esperanza de ajustar las reglas que actualmente prohíben los vuelos supersónicos comerciales sobre tierra.
Según la NASA, de lograrse el objetivo de volar silenciosamente a la velocidad del sonido, se podrían abrir nuevos mercados comerciales tanto de carga como de pasajeros.
El X-59 Questst, un avión único
Tal y como recoge Europa Press, el X-59 Questst es un avión experimental único en su tipo. Incorpora nueva tecnología junto con sistemas y componentes provenientes de diversos aviones militares a reacción, como su tren de aterrizaje de un F-16 y su sistema de soporte vital adaptado de un F-15. El motor es el del F18 Super Hornet, con 22.000 libras de empuje.
El X-59 Questst volará a más de 18.000 metros a una velocidad de alrededor de 1.500 kilómetros por hora, pero producirá a su paso un sonido tan fuerte como el cierre de una puerta de un automóvil (75 decibelios), en lugar de la estampida sónica propia de aviones que vuelan por encima de la velocidad del sonido.
El avión mide 29 metros de largo, tiene una superficie alar de 9 metros y cuenta con capacidad para un solo piloto.