Iberdrola ancla 50 gigantes en mitad del mar
Y ahora espera por Asturias.
Iberdrola ha instalado los cincuenta monopilotes del parque eólico marino Baltic Eagle, en Alemania. Con un diámetro de 8,75 a 9 metros y una longitud de entre 75 y 90 metros, aseguran que las turbinas eólicas estén ancladas de forma segura al fondo marino.
Los trabajos de construcción continúan según lo previsto y el siguiente paso es la instalación de las cincuenta piezas de transición, fabricadas en Avilés por Windar y que actualmente están ya almacenadas en el puerto de Mukran, han indicado desde Iberdrola a través de nota de prensa.
Durante su fabricación se crearon alrededor de 800 puestos de trabajo y participaron cerca de 30 proveedores del norte de España. Por su parte, la instalación del cableado interno, que al igual que la instalación de los monopilotes será llevada a cabo por Van Oord, está prevista para finales de 2023, para finalmente comenzar con la puesta en marcha a finales de 2024.
Capacidad para suministrar energía a casi medio millón de hogares
Los monopilotes fueron fabricados en Rostock (Alemania) por la empresa EEW SPC. En total son cinco los países europeos involucrados en la construcción de Baltic Eagle. Además de españolas, empresas de Alemania, Dinamarca, los Países Bajos y Bélgica están participando en las diferentes fases del parque.
Con una capacidad de producción de 476 MW, el parque eólico marino Baltic Eagle suministrará energía renovable a aproximadamente 475.000 hogares y reducirá las emisiones de CO2 en aproximadamente 800.000 toneladas al año. Baltic Eagle es el segundo de tres proyectos a gran escala en Alemania.
En costas del Báltico, Iberdrola ya opera el parque eólico Wikinger de 350 MW y está desarrollando el proyecto Windanker de 300 MW, que se completará en 2026. Juntos, estos parques eólicos marinos forman el llamado Baltic Hub de Iberdrola, que tendrá una capacidad total de más de 1,1 GW en 2026, con una inversión combinada de alrededor de 3.700 millones de euros.