Un hombre se atrinchera en un pueblo de León tras ser denunciado por violencia de genero
El hombre presentaba importantes heridas por cortes en brazos, manos y muñecas, y se observaba en el suelo un gran charco de sangre
Un hombre se ha atrincherado en su domicilio de la localidad leonesa de Villanueva de Valduezatras después de que su pareja interpusiera una denuncia por un presunto delito de violencia de género en la que solicitaba orden de protección.
Tras acudir al domicilio para escoltar a la denunciante, que tenía que recoger sus enseres, los agentes encontraron al denunciado en el interior del baño, sentado en la taza del sanitario, con un cuchillo en sus manos.
El hombre presentaba importantes heridas por cortes en brazos, manos y muñecas, y se observaba en el suelo un gran charco de sangre y amenazó con clavarse el cuchillo en el pecho si alguien se acercaba al mismo, según informaron fuentes policiales en un comunicado recogido por Europa Press.
A partir de esto, y ante el potencial riesgo de autolesión y el riesgo para los actuantes, la Policía Nacional procedió a comunicar los hechos y activó el Protocolo Policial correspondiente, por lo que se aseguró la zona, avisó al servicio de emergencias sanitarias y se solicitó la presencia del Negociador policial y el GOES.
Hasta la llegada de los servicios sanitarios, un miembro uniformado del Grupo de Atención al Ciudadano (GAC), consiguió que el atrincherado empatizase con el mismo, controló poco a poco la situación y se ganó la confianza de este varón. Las mismas fuentes han señalado que su "infatigable" gestión consiguió desescalar la gravedad de la misma y garantizar la seguridad de los agentes y del protagonista, lo que garantizó un entorno "relativamente seguro para los actuantes".
El agente del GAC, apoyado a su vez por otro agente del mismo grupo que se incorporó a la negociación, consiguió controlar casi totalmente la situación. El negociador, que llegó desde León capital, al observar la situación, se mantuvo al margen, apoyó y asesoró la actuación de los dos miembros de la radiopatrulla.
En torno a las 17.00 horas y tras unas cuatro horas de negociación consiguieron que el varón depusiese su actitud y entregase el cuchillo, y así evitar la actuación del grupo GOES, que se trasladaba al lugar desde la Jefatura Superior de Galicia.
Los Servicios de Emergencias trasladaron a un centro hospitalario al varón para su valoración física y psíquica, y tras su asistencia médica, el mismo fue ingresado en calabozos de la Comisaría Local.
Tras su puesta a disposición Judicial este martes, se ha decretado un Orden de Alejamiento y Comunicación con la Víctima.
