Un químico revela los efectos en tu cuerpo al beber agua del grifo
¿Existe una relación entre la cal del agua del grifo y la formación de cálculos renales?
La calidad y composición del agua corriente varía en función de dónde nos encontremos. Estas variaciones van a depender de elementos como el estado de las redes de tuberías, el tipo de suelo y de dónde provenga el agua que se consume.
Si bien el agua del grifo en España, salvo excepciones temporales por algún motivo puntual, es potable, hay ciudades donde su mala calidad se puede percibir en elementos tan evidentes como su sabor. Por ello, prefieren consumir agua embotellada. Sin embargo, hay personas que deciden consumir el agua embotellada por la creencia de pensar que existe una relación entre beber agua del grifo y la formación de cálculos renales por su contenido en cal.
Este hecho es muy popular en Italia, ya que, este país ocupa el primer lugar en Europa y el segundo en el mundo en consumo de agua mineral envasada. con todo lo que esto conlleva, ante todo, un enorme impacto medioambiental.
Pero ¿hasta qué punto es cierto?
El químico y divulgador científico Dario Bressanini aclaró en un video que el agua del grifo, a menudo rica en piedra caliza, puede aportar nutrientes beneficiosos para el organismo.
En el video, el experto explica que la piedra caliza, se compone principalmente de sales de calcio y magnesio, elementos necesarios para el cuerpo humano que también pueden ser absorbidos a través del agua que bebemos. Por tanto, la presencia de cal en el agua del grifo no sólo no es perjudicial, sino que puede considerarse un aporte de nutrientes.
Incluso el Istituto Superiore di Sanità también lo confirma y, de hecho, no existen razones sanitarias válidas para sustituir el agua del grifo por agua mineral con muy pocos residuos fijos. De hecho, en la web de la ISS se puede leer lo siguiente:
“La concentración de calcio presente en el agua potable doméstica no provoca un aumento de cálculos renales. El consejo generalizado de utilizar aguas ligeras o moderadamente bajas en minerales en lugar del agua del grifo para evitar la formación de cálculos no está justificado por evidencia científica.”
Además, Bressanini subraya, entre otras cosas, que esta creencia errónea podría ser la base del considerable consumo de agua mineral envasada en Italia, a pesar de que el agua del grifo que llega a nuestras casas es casi siempre perfectamente potable.