Sor Marta, 'la monja influencer', desvela cuánto se cobra en un convento
La religiosa ha explicado que las hermanas son "autónomas" y que sus ingresos proceden de las diversas actividades realizadas en el monasterio.
Vivir en un monasterio conlleva renunciar a grandes lujos para llevar una vida austera dedicada a Dios. Pero eso no significa que sus habitantes no necesiten dinero para cubrir sus necesidades básicas o permitirse algún capricho material. Por eso, mucha gente se pregunta de dónde sacarán ese dinero. Sor Marta, una monja benedictina conocida como 'la monja influencer' por sus vídeos en redes sociales y su nuevo podcast, lo ha revelado en su cuenta de TikTok, donde tiene casi 40.000 seguidores.
La religiosa ha explicado que los sacerdotes diocesanos sí tiene un sueldo procedente del Obispado porque este "está encargado de su espiritualidad, de que esté bien y también de que pueda vivir, lógicamente". Sin embargo, ha detallado que las monjas y monjes son "autónomos totalmente" y no reciben dinero de ninguna entidad: "No recibimos sueldo de ningún sitio. Ni del Estado, ni de la X de la Iglesia, ni del Obispado ni nada".
No obstante, la religiosa ha aclarado que algunas monjas o monjes cobran por ser maestros/as. Pero en su monasterio, el de Santa Cruz de Sahagún (León), no dan clases, con lo que no perciben ese sueldo, si no que sus recursos económicos provienen de otro sitio: "Recibimos dinero de los dulces, del museo, de la cosmética, es decir, de lo que vendemos".
Por último, Sor Marta ha asegurado que una monja, "si no tiene ningún sueldo por fuera", tiene sueldo fijo al jubilarse: "Estamos dadas de alta como autónomas y pagamos la Seguridad Social. Cotizamos todos los meses para luego tener jubilación".
Su convento busca becarias
"¿Sabes que se pueden hacer prácticas de monja?", plantea Sor Marta en su último vídeo de TikTok. Y es que ser monja no es una decisión que deba tomarse a la ligera ya que, como hemos visto, no es una profesión reconocida, no se tiene salario fijo y hay que renunciar al estilo de vida tradicional.
Por eso, el monasterio de Santa Cruz de Sahagún ofrece la posibilidad de probar la experiencia para valorar si esa vida es la que realmente se busca. “Sí, una joven que se planteé si el señor a la vida consagrada puede venir unos días a vivir en este monasterio”. “Abrimos las puertas este verano a chicas vocacionadas que quieran hacer una experiencia con nosotras en las fechas que ellas elijan”, añade otra de la hermanas.
Durante los días que dure la estancia, las becarias participarán con el resto de monjas en el trabajo y en la oración. “No todo es trabajo, y también se ve a Dios en la naturaleza, por lo que haremos parte del camino de Santiago”, desarrolla Sor Marta. “Esperamos que estos días de encuentro y reflexión con el Señor y las hermanas te ayuda a despejar tus dudas vocacionales”, finaliza la compañera de Sor Marta.