Síntomas de un golpe de calor: cómo detectarlo a tiempo y qué hacer si ya es demasiado tarde

Síntomas de un golpe de calor: cómo detectarlo a tiempo y qué hacer si ya es demasiado tarde

La rapidez en la respuesta es crucial para mitigar sus efectos adversos.

Una mujer abanicándose por el calor.Getty Images

El golpe de calor representa una emergencia médica que requiere atención inmediata. Este fenómeno ocurre cuando la temperatura corporal se eleva a niveles críticos, generalmente como resultado de una exposición prolongada a altas temperaturas o la realización de actividades físicas intensas bajo el sol. 

A diferencia de otras afecciones relacionadas con el calor, como el agotamiento por calor, el golpe de calor puede manifestarse de manera abrupta, sin aviso previo, y tiene el potencial de causar daños irreversibles en el cerebro y otros órganos vitales.

La rapidez en la respuesta es crucial para mitigar los efectos adversos del golpe de calor. Si se sospecha que alguien está sufriendo esta condición, es fundamental llamar de inmediato al número de emergencia local. Mientras se espera la asistencia médica, es esencial tomar medidas para reducir la temperatura corporal de la persona afectada.

Una de las primeras acciones a realizar es trasladar a la persona a un lugar fresco y sombreado, lejos de la fuente de calor. Si es posible, se debe intentar enfriar su cuerpo con métodos como la aplicación de toallas húmedas y frías en la piel, o incluso sumergir a la persona en agua fresca si está consciente y no hay contraindicaciones para hacerlo.

Es importante ofrecer líquidos, preferiblemente agua fresca o bebidas que contengan electrolitos, para rehidratar al individuo, siempre y cuando esté consciente y no presente dificultades para tragar. Evitar bebidas con cafeína o alcohol es esencial, ya que pueden contribuir a la deshidratación.

En casos donde la persona afectada pierda el conocimiento o no muestre signos de circulación, como respiración, tos o movimiento, se debe iniciar la reanimación cardiopulmonar de inmediato, siguiendo las pautas de primeros auxilios hasta que llegue la ayuda profesional.

El conocimiento y la aplicación de estas medidas pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Por ello, es vital estar preparados y saber cómo actuar frente a un golpe de calor, una condición que no discrimina y puede afectar a cualquier persona, independientemente de su edad o condición física. La prevención, la educación y la rápida intervención son las claves para combatir esta grave amenaza para la salud pública.