Por fin sabrás para qué sirve este pequeño agujero del baño
Seguro que te lo habías preguntado en numerosas ocasiones. Y, sí, te hace falta.
A menudo desconocemos para qué sirven muchas cosas cotidianas que nos rodean en el día a día. Algunas aunque incluso nos vengan acompañando desde prácticamente el nacimiento. Sin embargo, el hecho de que no sepamos cuál es el fin o utilidad de algo, eso no quiere decir que desaparezca su eficacia.
Los cuartos de baño tampoco son ajenos a esta dinámica. No, no se trata de los bidets que tan extraños resultan en otros países. Tampoco hablamos de algún curioso utensilio para guardar los cepillos de dientes. Es más común y puede hallarse en la práctica totalidad de hogares españoles, en forma de agujero.
En este sentido, hablamos de esos agujeros que pueden encontrarse en las piletas de los lavabos, justo debajo del grifo y en la propia cerámica del lavamanos.
¿Para qué sirve el agujero de los lavamanos?
Quizás ya lo sabías, pero este agujero es una parte clave de la pileta, puesto que está diseñado para ejercer la función de regulación del proceso de drenaje del agua. Básicamente, cuando el agua rebosa tanto que llega a la altura de dicho orificio, comienza a ser 'dragada' y así se evita que desborde el vaso del lavamanos. Es una vía de escape del agua cuando la tubería no puede desaguar por todo el agua por sí sola.