La parodia de TV3 que pone de acuerdo hasta a Juanma Moreno y Teresa Rodríguez
El sketch del programa satírico 'Està passant' ha ironizado con la imagen de la Virgen del Rocío y la Semana Santa andaluza.
Un sketch del programa satírico Està passant de la televisión autonómica catalana, TV3, sobre la imagen de la Virgen del Rocío ha provocado una oleada de reacciones en contra. Entre ellas las de políticos tan dispares como el presidente de la Junta, Juanma Moreno, y la líder de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez.
En el programa, emitido el martes, apareció una actriz caracterizada como la Virgen del Rocío con un muñeco a manera de bebé en brazos simulando al niño Jesús. Mientras, los presentadores Toni Soler y Jair Domínguez ironizaban con que la Virgen no sale de procesión en Semana Santa, además de hacer bromas con su vida sexual y su acento andaluz.
"El humor es una de las señas de identidad de nuestra tierra, pero para tener gracia se hace con respeto y cariño", ha remarcado Moreno en su cuenta de Twitter. Y ha añadido: "Es una falta de respeto a Andalucía, y a miles de andaluces y sus tradiciones. Espero que para pedir perdón sepan hacerlo mejor".
Mientras, la portavoz de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, considera que se puede hacer humor de todo, "también de la Semana Santa", pero no "con tantísimo 'malaje', ignorancia y andaluzofobia". "Imita el acento de tu puñetero pare, por ser suave", ha instado Rodríguez en Twitter.
Sobre esta polémica también se ha pronunciado el obispo de la Diócesis de Huelva, Santiago Gómez, quien ha asegurado que la libertad de expresión “no puede ofender las creencias religiosas, tampoco de los católicos rocieros". Además, ha enfatizado que "el derecho a la libertad de pensamiento y expresión, reconocido en la Declaración Universal de los Derechos del Hombre, no puede implicar el derecho de ofender el sentimiento religioso de los creyentes, principio que vale obviamente para cualquier religión”.
“La convivencia humana —continúa exponiendo— exige un clima de mutuo respeto para favorecer la paz entre nosotros. La crítica y la burla de los católicos demuestran una falta de sensibilidad humana y puede dar lugar a provocaciones indeseables", ha señalado.
Por último, el obispo de la diócesis onubense asegura que “no es ese el camino para trabajar por curar las heridas que puedan existir en nuestra convivencia".