Oleada de llamadas del miedo tras las publicaciones de la prensa británica sobre lo que pasa en España
Los turistas de Reino Unido denuncian que sufren turismofobia por parte de los residentes.
El medio británico BirminghamLive, ha alertado de que varios grupos de británicos "se apresuran a llamar" a los hoteles en España para "cancelar" sus vacaciones ante el aumento de las protestas en varias ciudades tal y como Mallorca, Tenerife o Barcelona durante las últimas semanas.
Según argumenta el medio, los turistas se encuentran preguntando si es "seguro" para ellos viajar. Citan como ejemplo el periódico mallorquín, Diario de Mallorca, más concretamente las palabras de María Gilbert, directora de un hotel, quien afirmó que "los clientes de toda la vida que llevaban años viniendo a Mallorca, y que ya habían hecho su reserva este año han llamado, después de ver la noticia, para cancelar".
Sin embargo, a pesar del miedo, lo cierto es que algunos de los destinos como Baleares recibieron casi 18 millones de turistas el año pasado y no solo eso, si no que además se han incrementado un 15% este año las reservar para el verano. Por ello, hace poco cerca de 50.000 habitantes salieron a las calles de Palma, para solicitar que se redujese el flujo de turistas permitidos en la isla.
Los turistas denuncian ataques contra ellos
Por su parte, el presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios de las Islas Baleares denunció sucesivos ataques contra los visitantes extranjeros por parte de los residentes, tal y como el pegado de pegatinas en la cristalera del conductor "para que no se pueda conducir." Asimismo, también lamenta que están surgiendo grafitis como 'Tourismus Macht Frei' lo que significa "el turismo te hace libre".
Finalmente, Blanc, quien es copropietario de Alquilair, afirmó que han estado "recibiendo llamadas durante semanas de huéspedes que están preocupados por las noticias de fobia al turismo. Hace unos días, una familia que se encontraba en una propiedad de alquiler vacacional en Bunyola encontró el parabrisas de su coche de alquiler con pegatinas que decían 'Turista, vete a casa'".