"Yo me voy": Eros Ramazzotti reta en pleno concierto al personal de seguridad
El artista italiano ha desatado la euforia de sus incondicionales la noche de este viernes en el WiZink Center de Madrid.
El artista italiano Eros Ramazzotti ha desatado la euforia de sus incondicionales con un concierto la noche de este viernes en el WiZink Center de Madrid. Tanto ha sido así que los espectadores se han acabado agolpando en las primeras filas en en un ataque de rebeldía que ha terminado con el cantante retando al personal de seguridad.
"Seguridad, yo me voy, ya. La gente esta aquí para divertirse. Si no, yo me voy", ha advertido el ídolo romano en una interrupción del recital en la que ha animado a la "revolución" contra la maniobra de los vigilantes, que obligaban al público a ocupar su lugar en el patio de butacas, para finalmente ceder ante la petición de orden.
El recital, enmarcado en la gira Batitto infinito, es el segundo que el italiano ofrece en España tras su incursión en 2022 en Sevilla, y el primero en Madrid desde 2019, en los que ha combinado su repertorio en italiano con el catálogo de sus éxitos traducidos al español. "Canto siempre en italiano y perdona si aparece cualquier error, pero esta noche es de buena música para todos", ha advertido.
Pasados diez minutos de las nueve, la velada se abrió con la propia Battito infinito, como acostumbra a comenzar en el tour, y continuó con Los últimos románticos, en la que el romano mezcló castellano e inglés para dar paso a Soy, cantada al alimón con Alejandro Sanz, cuya imagen apareció en pantalla caldeando el ambiente que definitivamente herviría con Dove C'e Musica.
El tema desató la euforia de los fans que, poco a poco, comenzaron a abandonar sus asientos para congregarse en la primera fila a abrazar al cantante, que bajó del escenario para la ocasión: para cuando Ramazzotti entonó Quanto amore sei, la seguridad intentaba disolver a la multitud mientras en el repertorio se sucedían Un emozione per sempre y Piu Che Poi, cantada a dúo con la corista Monica Hill.
Una introducción gospel que Eros ha acompañado con guitarra eléctrica ha dado lugar a Stella Gemela, a la que ha seguido el gran éxito del italiano Si bastasen un par de canciones que marcó el punto álgido del concierto coincidiendo con la reducción de la multitud.
"El problema es que hay que tratar a la gente bien, sin tocarla. Si la gente no se sienta no es un problema mío", ha exclamado Eros en su enfado con la seguridad, ante la que finalmente claudicó pidiendo por favor al público que se sentase.
Finalmente, el concierto concluyó con La cosa más bella, que devolvió a los asistentes su fervor inicial. Tras ella, el artista se entrelazó en un intenso abrazo con sus músicos y, agradeciendo la entrega absoluta del público madrileño, deshecho en gritos y coreos, puso rumbo a su próximo concierto, que tendrá lugar en el Palau Sant Jordi de Barcelona.