Los monumentos de Murcia que no te puedes perder si visitas la capital de la región

Murcia, una región conocida por sus playas y su clima cálido, también alberga una gran cantidad de joyas arquitectónicas que merecen ser descubiertas. Entre los monumentos más destacados se encuentra la Catedral de Murcia, con más de 600 años de historia. Este impresionante edificio se erige sobre la antigua mezquita de la ciudad y es famoso por su combinación de estilos gótico, renacentista y barroco. Además, cuenta con un museo que permite subir a su torre y visitar la famosa Capilla de los Vélez, donde reposa el corazón de Alfonso X El Sabio.

Otro de los edificios emblemáticos de la ciudad es el Real Casino de Murcia, situado en la céntrica calle Trapería. Construido en 1847, este edificio mezcla distintos estilos artísticos de la segunda mitad del siglo XIX y principios del siglo XX. Declarado monumento histórico-artístico nacional en 1983, el Casino es hoy un centro dinamizador de la cultura y los valores de la convivencia, destacando su salón de baile estilo Luis XV.

El Santuario de la Virgen de la Fuensanta es otro de los lugares imprescindibles. Este templo barroco, construido en 1694 sobre una antigua ermita medieval, alberga la imagen de la Virgen de la Fuensanta, patrona de la ciudad y la huerta murciana. Las esculturas y relieves de González Moreno y las pinturas de Pedro Flores hacen de este santuario un lugar de visita obligada para los amantes del arte sacro. Situado en el Parque Regional El Valle y Carrascoy, ofrece una magnífica vista panorámica de la ciudad de Murcia, especialmente durante el atardecer.

El Teatro Romano de Cartagena, construido por el emperador Augusto en el siglo I a.C., es otro de los monumentos que no puedes perderte. Descubierto en 1987, este teatro tenía capacidad para unos 6.000 espectadores y es una visita obligada junto con el museo diseñado por Rafael Moneo, que incorpora el palacio de Pascual Riquelme y la Iglesia de Santa María la Vieja. Este hallazgo arqueológico sigue siendo uno de los más sorprendentes de la ciudad.

El Castillo de Lorca, un recinto medieval que acogió a musulmanes, cristianos y judíos, es actualmente un gran espacio temático donde se celebran festivales y conciertos. Este castillo cuenta con una judería que alberga la única sinagoga en España que no se convirtió en iglesia, conservando los restos tal y como los dejaron los judíos en el siglo XV. La Iglesia de San Patricio, construida en agradecimiento por la victoria en la Batalla de los Alporchones en 1452, es otro de los monumentos importantes de Lorca. Este edificio renacentista, declarado Monumento Histórico-Artístico en 1941, es el único en España bajo la advocación de San Patricio.

En Caravaca de la Cruz, el castillo y la basílica de la Vera Cruz son puntos de interés destacados. Protegida por una muralla con 14 torreones, la basílica alberga la Santísima y Vera Cruz, una reliquia venerada desde el siglo XIII. El Castillo de Jumilla, construido en 1461 sobre una antigua fortificación musulmana, es otro ejemplo de restauración para espacio cultural. La visita a este castillo incluye un recorrido por las mazmorras, la sala de la tropa y la torre del maestre, entre otros.

El Santuario de la Virgen de la Esperanza de Calasparra, ubicado en el interior de una gruta junto al río Segura, es un lugar de paz y tranquilidad. Este templo del siglo XVII, tallado en roca, guarda en su interior dos imágenes de la Virgen de la Esperanza, conocidas como La Pequeñica y La Grande. Por último, el castillo de Moratalla, con su estructura islámica del siglo IX, es un punto importante en la defensa de Al-Andalus. La Torre del Homenaje, la más grande del castillo, destaca por su estilo gótico militar levantino.