Los medios internacionales se hacen eco del aviso de la Policía Nacional contra okupas en España
Aconsejan desde tomar medidas para aparentar que la casa está habitada a poner toda la tecnología posible alrededor de ella para evitar que entren.
“¿Te preocupan los okupas en España? Aquí tienes algunos consejos de la policía española para evitar que entren en tu casa”, así arrancan las noticias que han difundido diversos medios internacionales alertando a las personas de otros países que tengan casas en España.
Éstos aseguran que este fenómeno ha aumentado en últimos años en todo el país, así como que a él “no han ayudado las leyes recientes que dificultan mucho su expulsión”.
Y se hacen eco de las recomendaciones de la Policía Nacional. Ésta informa de que hay algunas medidas que puedes tomar para reducir el riesgo de que tu propiedad sea el objetivo. El primer consejo que da parece obvio, el cerrar bien la puerta con llave. Pero la policía española “dice que deberías hacerlo cada vez que salgas de casa, incluso si solo vas a la tienda de tu barrio o a visitar a un vecino”. Y si te vas a ir durante un periodo más largo, “asegúrate de tener buenos contactos con tus vecinos, que podrán avisarte de inmediato si alguien intenta entrar en tu casa”, señalan.
Otro aspecto que recogen se refiere a la publicación en los planes de vacaciones en las redes sociales: “No los publiques, ya que esto podría dar a los posibles okupas una pista de que tu casa estará vacía”. También aconsejan que se invierta en una puerta de entrada de alta tecnología y alta seguridad con múltiples cerraduras de acero y que se coloque rejas en las ventanas. También se pueden instalar cerraduras especiales y fuertes en las ventanas y puertas corredizas, añaden, haciéndose eco de los consejos policiales.
Además, precisan que si el propietario desea instalar cámaras de seguridad, deben colocarse en áreas con buena iluminación, y recuerdan que instalar un sistema de alarma también es un buen elemento disuasorio. Cuando se activa la alarma, significa que alguien está entrando y, por lo tanto, cometiendo un delito, lo que le da a la policía "mayores poderes para expulsarlos de inmediato”, explican.
Finalmente recogen la maniobra del despiste. Es decir, intentar que parezca que todavía hay gente en la casa cuando ya se han marchar. Formas de hacerlo son no dejar el buzón lleno de cartas, pidiendo a un vecino que las recoja, dejar el felpudo fuera de las casa y colocar plantas y elementos decorativos en los balcones y ventanas, aunque, obviamente, estos puedan deteriorarse durante una ausencia larga de los propietarios.