Lío en la frontera de España con Marruecos por 11 litros de aceite

Lío en la frontera de España con Marruecos por 11 litros de aceite

Hay un máximo de kilos para poder pasar alimentos en la frontera.

MelillaGetty

Un ciudadano melillense ha denunciado públicamente que fue obligado a deshacerse de 11,2 litros de aceite de oliva en el paso fronterizo de Beni-Enzar al entrar en Melilla, según el Faro de Melilla. El afectado sostiene que esta decisión de la Guardia Civil constituye un caso de prevaricación administrativa, al no aplicar correctamente la normativa vigente.

Este vecino explica que la circular IM/1/2022, que regula el control sanitario sobre mercancías con destino o procedencia de Ceuta y Melilla, establece un límite de 10 kilos por vehículo para productos alimentarios, y que dicha normativa no ha sido actualizada en los últimos dos años. Según su versión, la normativa que debería aplicarse en su caso es la Orden PJC/756/2024, del 22 de julio, la cual delimita las actuaciones en los servicios de control fronterizo, dependientes de los ministerios de Agricultura y Sanidad. “La regulación de las mercancías alimentarias no corresponde a la Guardia Civil, sino a estos ministerios”, afirma el ciudadano.

El incidente ocurrió el 7 de julio, cuando, tras regresar de Marruecos con su familia y varios productos comprados, incluyendo 11,5 kilos de aceite de oliva elaborado por familiares, fue detenido en el control de la Guardia Civil. Los agentes le informaron que solo podía transportar 5 litros de aceite y le ofrecieron dos opciones: regresar a Marruecos o recibir un acta de abandono de la mercancía. El afectado optó por esta última y posteriormente, al revisar la normativa, descubrió que estaba dentro de los límites permitidos para el transporte de productos no comerciales.

Este melillense presentó una queja formal a la Delegación del Gobierno, en la que exponía que su aceite no era parte de una expedición comercial y que no incumplía las normativas sanitarias. Sin embargo, asegura que no ha recibido respuesta alguna. Ante esta falta de contestación, decidió llevar su caso a las redes sociales, donde ha generado un considerable apoyo, con otros ciudadanos denunciando situaciones similares. Incluso ha creado un modelo de reclamación disponible en línea para quienes deseen sumarse a su causa.

Actualmente, está valorando la posibilidad de llevar el caso ante la Fiscalía por prevaricación administrativa, argumentando que la circular IM/1/2022 ha sido derogada y no debería haberse aplicado. Continúa verificando la normativa vigente para proceder con la denuncia.