Las falsas medusas causan estragos en playas españolas

Las carabelas portuguesas ya han hecho acto de presencia este verano en las costas españolas. Tal como han alertado en estas últimas semanas autoridades locales, este tipo de organismo marino ya ha picado a algunos bañistas de las playas de San Sebastián, y ya se han dejado ver en zonas de Cantabria, Galicia, la Costa Brava y Andalucía.

Como detallaba Meteored hace unos días, las carabelas portuguesas no son medusas como tales, sino una "colonia de organismos que trabajan en conjunto para sobrevivir, formando un hidrozoo gelatinoso que no puede vivir de forma individual". Su tamaño, de unos 30 centímetros de longitud se complementa con unos tentáculos muy largos, el principal peligro para los bañistas. 

En caso de que detectes alguna cerca de ti, las autoridades recomiendan lo primero mantener la calma y salir del agua.

Si te ha acabado picando, lo recomendable es lavar la herida con la propia agua del mar, ya que el agua dulce, el vinagre u otras sustancias podrían liberar más toxicidad de los tentáculos adheridos a la piel. Una vez lavada la zona, retirar los fragmentos de medusa pero sin usar las manos, sino unas pizas o algún objeto que pueda hacer algo de fuerza, como una tarjeta. Si hay irritación o dolor, se puede aplicar frío pero no directamente hielo.

Rafael González Quirós, director del Centro Oceanográfico de Gijón, señalaba hace un año a El Comercio que hay que relativizar su peligrosidad: "Muchas veces se dice que puede causar la muerte, pero eso solo es posible en caso de haber dado con un ejemplar grande y que a quien pique lo haga en gran cantidad y tenga problemas de corazón".

Según sus pautas, nunca hay que tocarlas —ni siquiera aunque parezca que está muerta en la arena— y, si hay contacto, hay que pedir ayuda a los socorristas. "Lo que nunca hay que hacer es frotarse ni rascarse", puntualiza.

La Guardia Civil tiene un protocolo específico ante la Carabela Portuguesa. Si advierte la presencia de al menos tres ejemplares, coloca la bandera amarilla. Si son más, será roja.

El protocolo también recoge el cierre total del baño en el conjunto de las playas en caso de avistarse 15 o más ejemplares de Carabela Portuguesa. En ese caso, se colocará bandera roja en las playas, la bandera con el dibujo de medusas y el baño estará prohibido.