La venta de petardos acuáticos se dispara por las orcas del Estrecho

La venta de petardos acuáticos se dispara por las orcas del Estrecho

Son utilizados para ahuyentarlas.

Grupo de orcas.Getty Images/500px

Los incesantes encontronazos con orcas en el Estrecho han llevado a los propietarios de veleros a comprar petardos acuáticos para ahuyentarlas, según recoge Europa Sur. Al parecer, las tiendas de Algeciras están disparando las ventas de estos explosivos, cuyo precio oscila entre 5 y 19 euros por caja.

Grupos ecologistas y animalistas ya denunciaban el año pasado en 8Directo el uso de varios métodos para espantar a los cetáceos, como petardos, bengalas, lejía o arena

"Estamos vigilantes, detrás de ellos. Tenemos la sospecha de varias embarcaciones que llevan armamento, entre comillas, para espantar a las orcas si interaccionan con ellos. Lo que pasa es que se tapan entre ellos y ahora está la cosa un poco más parada, se han venido abajo, después de saliese a la luz pública un vídeo en el que se veía cómo disparaban a unas orcas en el Estrecho", revelaron.

La grabación a la que se refieren se hizo viral en redes sociales porque mostraba a los tripulantes de un catamarán disparando contra un grupo de orcas que se encontraba cerca de su embarcación. Días más tarde, la Guardia Civil identificó a los responsables en el Puerto de Almerimar (El Ejido).

Prohibido atacarles

El Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco) recuerda en su página web que la población de orcas está catalogada como 'vulnerable' en el Catálogo Español de Especies Amenazadas (CEEA) desarrollado mediante el Real Decreto 139/2011, de 4 de febrero.

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Esto conlleva que se prohíbe matar, capturar, perseguir o molestar a los cetáceos, tal y como recoge el artículo 57 de la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y la Biodiversidad. En concreto, quedan terminantemente prohibidas las siguientes acciones:

  • Acercarse a las orcas a menos de 60 metros con la embarcación.
  • El contacto físico con ellas.
  • Alimentarles o tirarles cualquier objeto o sustancia que pueda resultar perjudicial para ellas.
  • Impedir su libre movimiento, interceptar su trayectoria, cortar su paso o atravesar un grupo, en cualquier momento y dirección.
  • Separar o dispersar al grupo, especialmente si se trata de un adulto y su cría.
  • Producir ruidos y sonidos fuertes o estridentes para intentar atraerlos o alejarlos,
  • Bañarse o bucear en la Zona de Exclusión del Espacio Móvil de Protección de Cetáceos.