La razón por la que se inventó el carrito de la compra

En la actualidad, es difícil imaginar un supermercado sin carritos de la compra. Estos elementos, tan comunes y cotidianos, han transformado la manera en que realizamos nuestras compras. Sin embargo, pocos conocen la historia detrás de su invención y las razones que llevaron a su creación. Este artículo explora el origen del carrito de la compra, un invento que revolucionó el comercio minorista y facilitó la vida de millones de personas en todo el mundo.

El carrito de la compra no solo ha cambiado la experiencia de compra, sino que también ha influido en la economía y en la forma en que los supermercados operan. Desde su invención, ha permitido a los clientes adquirir más productos en una sola visita, aumentando así las ventas y la eficiencia de los establecimientos comerciales. A continuación, se detalla el proceso de creación y las motivaciones detrás de este ingenioso invento.

La historia del carrito de la compra comienza en la década de 1930, en plena Gran Depresión. Sylvan Goldman, un empresario estadounidense y propietario de una cadena de supermercados en Oklahoma, observó que sus clientes tenían dificultades para llevar todos los productos que querían comprar. En esa época, los compradores utilizaban pequeñas cestas de mano, lo que limitaba la cantidad de artículos que podían adquirir. Goldman se dio cuenta de que si sus clientes podían llevar más productos, sus ventas aumentarían significativamente.

Inspirado por una silla plegable, Goldman tuvo la idea de crear un dispositivo que permitiera a los clientes transportar más productos sin esfuerzo. En 1937, después de varios intentos y prototipos, presentó el primer carrito de la compra. Este consistía en una estructura metálica con ruedas y dos cestas apiladas, una encima de la otra. La invención fue un éxito inmediato y pronto se convirtió en un elemento indispensable en los supermercados de todo el país.

El proceso de creación del carrito de la compra no fue sencillo. Goldman tuvo que superar varios desafíos técnicos y logísticos. En primer lugar, necesitaba encontrar un diseño que fuera práctico y fácil de usar. Después de varios prototipos fallidos, finalmente logró desarrollar un modelo que cumplía con sus expectativas. Además, tuvo que convencer a los clientes de que utilizaran el nuevo dispositivo, ya que muchos se mostraban reacios a abandonar las tradicionales cestas de mano.

Para promover el uso del carrito de la compra, Goldman implementó una serie de estrategias de marketing. Colocó carteles en sus tiendas explicando las ventajas del nuevo invento y contrató a empleados para que mostraran a los clientes cómo utilizarlo. Poco a poco, los compradores comenzaron a adoptar el carrito de la compra y a apreciar su comodidad y funcionalidad.

El éxito del carrito de la compra no se limitó a Estados Unidos. Pronto, otros países comenzaron a adoptar el invento de Goldman. En España, por ejemplo, el carrito de la compra se popularizó en la década de 1970, cuando los supermercados SPAR encargaron a la empresa Rolser la creación de un modelo adaptado a las necesidades de sus clientes. Rolser desarrolló varios modelos de carritos de compra con estructuras metálicas y ruedas, que se pusieron a la venta en grandes almacenes como Galerías Preciados.

El impacto del carrito de la compra en la economía y en la sociedad ha sido significativo. Al facilitar el transporte de productos, ha permitido a los supermercados aumentar sus ventas y mejorar la experiencia de compra de sus clientes. Además, ha contribuido a la expansión de los supermercados y a la creación de nuevos empleos en el sector minorista.